Animan a socorristas y padres a apuntar la fórmula para evitar ahogamientos que cuenta con el respaldo del Ministerio de Sanidad
Una técnica que destaca por su simplicidad y efectividad.
En plena temporada alta, el problema de los ahogamientos en España vuelve a ponerse sobre la mesa y ha reavivado la preocupación ciudadana. El pasado 30 de julio dos hermanos de 11 y 13 años fallecieron ahogados en la playa de Llarga de Salou (Tarragona), un suceso que ejemplifica el coste humano detrás de las cifras. Por ello, tanto cuerpos policiales como profesionales sanitarios promueven la educación en primeros auxilios.
En junio murieron 73 personas ahogadas en España, una cifra que ha reavivado el llamado a medidas simples pero efectivas. Entre las distintas técnicas de socorrismo que promueven la prevención de ahogamientos hay una que destaca por su simplicidad y efectividad: la regla del 10/20. Más que una técnica, se trata de una pauta de vigilancia que cuenta con el respaldo del Ministerio de Sanidad y de la Sociedad Española de Pediatría (AEPap).
Esta es una pauta muy concreta y fácil de aplicar: consiste en mirar al agua cada 10 segundos y mantenerse a una distancia que permita llegar hasta la persona en 20 segundos como máximo. No obstante, en niños muy pequeños se aconseja acortar esa distancia ya que el ahogamiento puede ser extremadamente rápido y silencioso. Este registro visual frecuente aumenta la probabilidad de detectar cualquier signo de peligro a tiempo.
Vigilancia constante
La Policía Nacional ha definido esta técnica como una medida eficaz no solo dirigida a socorristas, ya que en la playa son muchos los bañistas que pueden sufrir accidentes de forma simultánea, sino también para padres, cuidadores y público general. No obstante, desde la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo (REFSS) explican que la regla 10/20 no es algo establecido a nivel nacional.
“Desde la RFESS no promovemos esta regla, sino la vigilancia constante”, ha asegurado su portavoz de Prevención, Jessica Pino Espinosa, en declaraciones a Vozpópuli. “Nunca se debe disminuir el nivel de alerta y no dejar al menor sin supervisión de un adulto responsable, aunque exista socorrista”, concluye. Toda prevención es poca, por ello algunas playas acogen simulacros y talleres de primeros auxilios para todos aquellos interesados.
En distintas costas españolas los drones y otras nuevas tecnologías ya forman parte del operativo de salvamento, ayudando a detectar bañistas en riesgo y a reducir los tiempos de respuesta. Además, los especialistas recuerdan algunas medidas complementarias: respetar banderas y recomendaciones de playas, evitar la ingesta de alcohol antes y durante el baño, y dar prioridad a la supervisión activa sobre cualquier otra actividad.