Esto son los embalses que tienen reserva de agua para un año

Esto son los embalses que tienen reserva de agua para un año

Hace doce meses, sin embargo, la situación era muy diferente.

Vista del embalse de Ullibarri-Gamboa este sábado.L. Rico

Mientras regiones como Cataluña se preparan para declarar la emergencia por sequía, en otras zonas de España se disponen a anunciar que las lluvias caídas en diciembre les garantiza reservas suficientes para asegurar el abastecimiento de agua potable, al menos durante el próximo año. 

Es el caso de de Bizkaia, donde las lluvias intensas caídas en el País Vasco las últimas semanas, han provocado que los embalses que suministran agua a la provincia desde Araba y Burgos se encuentren "en una situación mucho mejor que el año pasado”, explica al diario Deia el director del Consorcio de Aguas Bilbao-Bizkaia (CABB), Pedro Barreiro, quien avanza que "próximamente es casi seguro que alcancemos la curva de garantía".

Estos pantanos que surten de agua a los vizcaínos contaban este jueves con 135,4 hectómetros cúbicos recogidos, lo que representa mejores registros que hace doce meses, cuando acumulaban 110,5 hectómetros cúbicos, un 50,5% de su capacidad. El sistema del Zadorra estaba al 59,2% del lleno total y Artiba, Oiloa, Nocedal, Zollo y Undurraga estaban al 76,2%. Además, el pantano de Ordunte se encontraba al 83,2%.

Hace doce meses, el conjunto de estos pantanos acumulaba 24,8 hectómetros cúbicos menos de reservas que ahora y marcaba 11,4 puntos menos de llenado de los embalses. Así, el agua recogida se sitúa 14,2 hectómetros  por debajo de la curva de garantía, línea que establece el nivel deseable de reservas de agua en cada momento del año para que las probabilidades de evolución a escenarios de sequía sean mínimas.

“Con estas reservas, está garantizado el suministro durante el próximo año", asegura el director del CABB, quien señala en el citado diario que si sigue lloviendo, esa agua no sea acumulará en los embalses. "En pocos días desaparece porque Iberdrola empezaría a turbinar”, apunta Barreiro. Es decir, se abrirían las compuertas para generar energía eléctrica en el salto de agua de 300 metros de altura sobre el río Arratia.

Hace doce meses, el conjunto de estos pantanos acumulaba 24,8 hectómetros cúbicos menos de reservas que ahora y marcaba 11,4 puntos menos de llenado de los embalses. Así, el agua recogida se sitúa todavía por debajo de la curva de garantía, línea que establece el nivel de reservas de agua deseables en cada momento del año para que las probabilidades de evolución a escenarios de sequía sean mínimas.