Multan a cinco vendedores por desordenar sus puestos de ropa y vienen los clientes a defenderles: "No estamos de acuerdo, es divertido curiosear"
"Si todo estuviera en orden, iríamos a una tienda", aseguran.

La Policía municipal italiana ha multado a cinco vendedores ambulantes por tener sus productos desordenados. Tal y como informa el diario italiano Il Gazzetino, todas las sanciones tienen el mismo precio: 100 euros. A partir de ahora, tendrán que organizar la ropa si no quieren enfrentarse a estas multas, pero los clientes se han pronunciado al respecto.
En declaraciones recogidas por el periódico, el comandante de la policía local de Treviso, Patrich Antonello, explica que "aparte de estas situaciones denunciadas, los vendedores están empezando a respetar las normas con más cuidado". Una opinión que choca con los propios consumidores, que han relatado que "lo bonito del mercado es rebuscar y rebuscar hasta encontrar algo que te guste. Si todo estuviera en orden, iríamos a una tienda".
Aun así, los propios comerciantes se han pronunciado a favor de las nuevas regulaciones, que, explican, "exigen una exposición ordenada". Uno de ellos, Joan Nicola, entiende que "haya controles", que "todos tenemos que trabajar duro", y opina que "con algunas cosas tenemos que tener cuidado". "A menudo, se exhiben contenedores con mercancía a granel, junto con falsas promesas de ofertas, el mercado debe tener cierto decoro", continúa.
Una opinión que comparte con Houssain, que vende principalmente bolsos y objetos en uno de estos mercados ambulantes. Por su parte, cree que "veo gente que no sólo es desordenada, sino que también deja basura y no presta atención, cuando en realidad deberíamos evitar cualquier situación de deterioro". "No sólo el desorden, sino también la atención se centra en los artículos de segunda mano: son baratos y se rompen rápidamente", agrega.
No obstante, y tal como se mencionó anteriormente, no todos los clientes están de acuerdo. "Me gusta rebuscar entre la ropa para encontrar la que más me gusta", admite una de ellas en declaraciones también recogidas por el medio. "Mucha gente ve las ofertas, así que se sienten atraídos por los puestos que anuncian precios bajos, independientemente de la mercancía", reconoce otra. Pero no a todos les gusta rebuscar: "Las penalizaciones son justas: es más higiénico y correcto ver la mercancía expuesta de cierta manera. La apariencia también importa", admite un último cliente.
