Un chef vivió en la calle durante año y medio y la comida china de un desconocido le acaba cambiando la vida: "Me sorprendió con ese gran regalo”
“Es un nuevo capítulo. Un nuevo comienzo”.

A veces, las historias que transforman vidas empiezan en los lugares menos esperados. En una parada de autobús de Boca Ratón, Florida, donde cada día se cruzaban decenas de personas sin prestarse demasiada atención, un pequeño gesto ––una bandeja de comida china–– desencadenó un cambio radical en la vida de un hombre que llevaba casi dos años viviendo en la calle.
Ese hombre es Peter, un chef con décadas de experiencia culinaria cuyo apellido se reserva por privacidad. Según contó, perdió su trabajo y, poco después, su hogar. Desde entonces, su rutina se reducía a sobrevivir como podía, enfrentándose a la incertidumbre diaria, y también a dos ataques cardíacos mientras vivía en la calle.
A sus 67 años, seguía aferrado a la esperanza de ahorrar lo suficiente para alquilar un pequeño estudio. Fue entonces cuando apareció John Ferber, un emprendedor tecnológico jubilado que solía verlo sentado siempre en el mismo banco.
Un gesto que cambió su vida
Movido por la curiosidad y la empatía, John decidió acercarse un día con un plato de comida china. Ese sencillo gesto abrió la puerta a una conversación que cambiaría la vida de Peter. Ferber grabó la charla —con la autorización de Peter— y la compartió en redes sociales para visibilizar su situación.
En el vídeo, Peter habló abiertamente de su experiencia viviendo en la calle. “He pagado mi penitencia a Dios”, explicó. “Él me dio la fuerza para sentarme aquí, perseverar, reflexionar y darme cuenta de en qué aspectos de mi vida podría haberlo hecho mejor”. Sus palabras, llenas de sinceridad, no tardaron en conmover a miles de personas en internet.
Para ayudarlo a dar el siguiente paso, Ferber creó una campaña en GoFundMe. La respuesta fue inmediata: en poco tiempo, la recaudación de casi 4.000 dólares, suficientes para que Peter abandonara la calle y se mudara a una vivienda temporal “agradable y segura”, según explicó Ferber a People.
Para alguien que confesó haber pasado hasta siete días seguidos sin comer, disponer de un lugar donde dormir marcó un antes y un después. “Es un nuevo capítulo. Un nuevo comienzo”, dijo emocionado al medio local, WPTV.
Volver a la cocina y a su vida
Con una trayectoria de años como chef, soñaba con recuperar la estabilidad que un trabajo fijo le podía ofrecer. Ferber, decidido a ayudarlo, también se ocupó de esto y consiguió para Peter un empleo bien remunerado como chef a tiempo completo en una empresa de catering.
Con parte del dinero recaudado, Ferber lo acompañó además a comprar ropa nueva. “Le dije que comprara lo que quisiera”, relató. Peter, humilde, escogió únicamente dos camisas de golf. Ese gesto reflejaba la profunda gratitud con la que vivía cada paso de esta nueva etapa.
Mientras Peter se adapta a su vida renovada, Ferber continúa a su lado. Planea ayudarlo a encontrar una vivienda permanente y a adquirir artículos básicos para su día a día. Su compromiso no termina con la recaudación, quiere asegurarse de que Peter tenga una oportunidad real y duradera de empezar de cero.
