Un hombre de 60 años pide consejo dietético a la IA y la historia acaba en urgencias con alucinaciones y paranoia
Cuando acudió a urgencias, sospechaba que un vecino lo había envenenado.

Un artículo reciente en Annals of Internal Medicine (a través de Wired) ha documentado un caso de bromismo (intoxicación por bromuro) en un hombre de 60 años que, según relató, modificó su dieta siguiendo una recomendación de ChatGPT.
El paciente, preocupado por los presuntos efectos nocivos de la sal común (cloruro de sodio), consultó al chatbot de OpenAI para buscar alternativas. La respuesta que recibió le llevó a sustituirla por bromuro de sodio, que adquirió por internet y consumió durante unos tres meses.
Cuando acudió a urgencias, sospechaba que un vecino lo había envenenado. No informó de que tomara medicamentos o suplementos ni de antecedentes médicos. Tras consultar con el Centro de Control de Envenenamientos, los especialistas sospecharon una pseudohipecloremia causada por bromismo. Las pruebas revelaron un nivel de bromuro de 1.700 mg/L, frente al rango habitual de 0,9 a 7,3 mg/L.
El hombre presentó acné, fatiga, ataxia leve, sed intensa, paranoia y alucinaciones visuales y auditivas. Tras tres semanas de ingreso hospitalario, se recuperó sin secuelas. Los autores del caso recuerdan que, en el pasado, las sales de bromuro se empleaban en medicamentos para tratar la ansiedad, la histeria o el insomnio, aunque su uso decayó por sus efectos adversos.
Para comprobar el origen de la recomendación, los médicos repitieron la consulta al modelo ChatGPT-3.5 y recibieron la misma sugerencia de sustituir el cloruro por bromuro, sin advertencias médicas, aunque el sistema añadió que “el contexto es importante”.
OpenAI, que presentó la semana pasada GPT-5, asegura que la nueva versión mejora la precisión en temas sanitarios y puede orientar sobre qué preguntar a un especialista, pero no sustituye la labor médica. La empresa recuerda que su herramienta no está diseñada para diagnosticar ni tratar enfermedades. Y así esta historia termina con la moraleja perfecta en estos tiempos confusos: ante cualquier duda sobre salud, ya sea dieta o síntomas..., lo mejor que puedes hacer es consultar con tu médico de cabecera o con un especialista.
