En el 'Financial Times' se enteran de la existencia del "fachaleco" español y lanzan esta pregunta al aire
Da pie a una larga reflexión.

El prestigioso diario económico británico Financial Times ha dedicado un amplio artículo a hacer algunas reflexiones tras enterarse de la existencia del concepto "fachaleco", esa prenda de ropa vinculada a las personas de una determinada ideológica política.
El que firma el texto es Robert Armstrong, que titula con una pregunta al aire: "¿Estos pantalones me hacen parecer fascista?". El autor explica que en un reciente viaje a Madrid descubrió la palabra "fachaleco" y avisa: "No la encontrarás en ningún diccionario de español".
"Es una palabra compuesta de facha (fascista) y chaleco. Se refiere, según me dicen mis informantes españoles, a un tipo de chaleco bastante específico: una chaqueta acolchada ligera de canalé negra o azul, que se suele llevar sobre una camisa blanca y, a menudo, debajo de una chaqueta de traje azul", señala.
El autor señala que "el fachaleco lo usa cualquier hombre de cualquier edad que, por lo general, trabaje en finanzas, que deteste al presidente socialista Pedro Sánchez, que le guste la economía liberal, que no le guste la inmigración ilegal y que desapruebe firmemente el separatismo catalán".
Armstrong admite que todo eso "incurre en los estereotipos más groseros": "Pero ¿para qué sirve la ropa si no es para tipificarnos?".
Tras eso, el autor reflexiona sobre "qué convierte a una prenda en un identificador político": "Sin duda, existe un vínculo entre la ropa abiertamente tradicionalista y la derecha. Al fin y al cabo, la tradición es lo que los conservadores quieren conservar".
Además, señala que un elemento característico de "la vestimenta políticamente conservadora" es "la idea de que la ropa de los hombres debe identificarlos claramente como hombres".
"Mientras que la derecha se inclina por la ropa 'tradicional', los jóvenes izquierdistas, según mi experiencia, la usan con ironía o con un aire anticuado", reflexiona antes de proseguir: "Los conservadores consideran las distinciones -entre edades, géneros, clases económicas, nacionalidades, roles familiares, etc- como los factores que impiden el desmoronamiento de la sociedad. Los liberales ven estas distinciones como inhibidores anacrónicos del potencial humano individual".
