Alcaraz consigue una sufridísima victoria a cinco sets frente a Fognini en su debut en Wimbledon
El tenista murciano superó al italiano por 7-5, 6-7, 7-5, 3-6 y 6-1 en un partido que se antojaba como un trámite y se le atragantó mucho más de lo esperado.

Carlos Alcaraz ya está en segunda ronda de Wimbledon. Eso sí, con un sufrimiento que ni el más pesimista podría atisbar. El murciano certificó su victoria tras más de cuatro y media de partido y en cinco sets. Lo que parecía que sería un mero trámite para el tenista español, terminó por casi convertirse en una de las mayores sorpresas de los últimos años en la catedral del tenis.
Sin embargo, y pese a un enorme desgaste físico y mental, Alcaraz pudo sobreponerse a los problemas que iban surgiendo durante el encuentro y que poco a poco iban dotando a Fognini (38 años y número 135 del mundo) de una confianza que ni en sus mejores sueños se habría imaginado. Por suerte para el español, la lógica terminó por imponerse y el partido -aunque más largo de lo esperado- se saldo con una victoria de la que seguro tendrá que extraer varias lecciones.
El encuentro comenzó con un guerrero Fognini, que logró mantener su servicio hasta el 5-5, momento en el que Alcaraz pudo aprovechar una de las bolas de break concedida por el italiano, y que en juegos anteriores se le habían escapado. Con el 6-5 arriba, 'Carlitos' pudo cerrar el set por 7-5, en un parcial más que complicado para el murciano que no se encontró cómodo en ningún momento del partido. Prueba de ello son los 63 errores no forzados que cometió en un encuentro en el que lo único positivo fue la victoria.
Al igual que en el primer set, Fognini se recompuso pese al golpe de perder la primera manga hasta el punto de forzar el tie-break, que en esta ocasión, que supo jugarlo de una manera magistral y cerró por 7-5.
Uno a uno y de vuelta a empezar. El tercer set comenzaba nuevamente de una forma tremendamente disputada, hasta el punto de que casi llega nuevamente al desempate, aunque por suerte para Alcaraz, consiguió cerrar con una sufrida y postrera rotura para colocar el 7-5 definitivo.
Fognini, una piedra en el zapato
Nuevamente por delante y con todo a favor, el de El Palmar se las imaginaba muy felices una vez superadas las dificultades. Pero nada más lejos de la realidad. Fognini tenía hambre de victoria y desplegando un juego pocas veces visto en él -y menos en hierba-, el italiano consiguió desesperar a Alcaraz, que en un momento del partido llegó a quejarse por el mal papel desempeñado: "No puedo sacar ni restar. Qué vergüenza", se lamentaba el murciano.
Y efectivamente, nuevamente el italiano empataba el partido con un tanteo que denotaba una importante suficiencia: dos roturas, 6-2 y todo se iba a disputar en el quinto y definitivo set. Cara o cruz, no quedaba otra. Y Alcaraz era plenamente consciente. El vigente campeón, cabeza de serie número tres y flamante ganador de Roland Garros, no podía decir adiós en la central de Wimbledon a las primeras de cambio.
Cambio de chip, 'partido a un set' y el 'modo Alcaraz' desplegado. No dio opción, desplegó el tenis arrollador al que nos tiene acostumbrados y con dos roturas dolorosísimas logró el 5-0. A respirar tranquilo. Finalmente, Fognini pudo maquillar mínimamente el marcador del quinto set, colocó el '1' en su casillero, pero Alcaraz logró cerrar el set y el partido por 6-1 en el último set y tras cuatro horas y 37 minutos.