Rudy Fernández: "La transición en la selección tiene que ser poco a poco, sin pensar en el pasado"
El exjugador de baloncesto repasa para 'El HuffPost', durante un descanso de un rodaje de Decathlon, la situación en la que se encuentra España en pleno cambio generacional.

Rudy Fernández puso punto y final el pasado verano a una exitosa y larga carrera con la disputa de los Juegos Olímpicos de París. Desde que debutara con 17 años en el Juventut de Badalona allá por el mes de abril del 2002 y hasta que colgó las botas, tanto con el Real Madrid como con España, en 2024 y con 39 años, su carrera ha estado ligada al éxito y a la conquista de títulos.
Con la selección absoluta, el balear ha ganado dos oros Mundiales, cuatro oros, una plata y un bronce en Eurobaskets y dos platas y un bronce olímpico. En clubes, su palmarés se compone de, nada más y nada menos, siete ligas ACB, siete Copas del Rey, tres Euroligas, nueve Supercopas de España, una Eurocup y una Copa Intercontinental. En la NBA, el balear jugó cuatro temporadas, tres de ellas en los Portland Trail Blazers (2008-2011) y una más en los Denver Nuggets (2011-2012) y pudo participar en 2009 en el concurso de mates del All Star.
Desde ese partido en París, Fernández está viviendo una nueva faceta en su vida: la de ser padre a tiempo completo de sus tres hijos, Alan, Aura y Anais. Sin viajes, partidos ni concentraciones, el exjugador de 40 años les hace de chófer, les acompaña en su día a día y es testigo de cómo crecen junto a Helen Lindes, su mujer. También está pudiendo descubrir otros hobbies, como jugar al golf, deporte al que le picaron sus excompañeros Pau Gasol y Sergio Rodríguez, así como Rafa Nadal.
Además, sigue realizando campañas como la última a la que se ha sumado, para Decathlon con otras estrellas del deporte español como Alejandro Valverde, Almudena Cid y Saúl Craviotto. Los cuatro han promocionado productos básicos y únicos de la marca, conocidos como Productos Azules, accesibles para todo el mundo y que despiertan la ilusión por los inicios deportivos, tanto en los más pequeños como en los adultos que deciden aventurarse a descubrir un nuevo deporte.
El HuffPost pudo hablar durante unos minutos con Rudy durante el rodaje del spot de la marca francesa, antes del inicio de los playoffs de la Liga Endesa, para repasar el futuro de la selección española, el Eurobasket que acogerá Madrid en 2029 o cómo ha cambiado el baloncesto de formación en los últimos años.
Desde que eras niño te has recorrido todos los pasillos de Productos Azules...
Siempre he sido muy deportista y he tocado todo tipo de deportes. Yo empecé jugando al fútbol, pero con mi padre jugaba mucho a tenis; luego acabé jugando a baloncesto y mi madre también me puso a hacer natación.
Para mí lo más importante, es que aunque te formes o estés centrado en un deporte, es prioridad el poder probar otras disciplinas y aprender de cada una de ellas. Escuché a otro jugador profesional que decía que le había ido muy bien practicar otros deportes para después ejecutarlos en el deporte del que era profesional.
Yo ahora que soy padre una de las primeras cosas que he hecho es poner a mis hijos a hacer deporte, como natación, y bueno… un poco de todo. Y Decathlon nos ofrece esa seguridad de contar con productos para iniciarse en cualquier tipo de disciplina. Siempre tienen los mejores productos en ese sentido.

¿Cuándo tomaste la decisión de seguir en el baloncesto?
Estuve dos años jugando a fútbol y es cierto que ahí, a nivel de logística, era muy difícil encajar todos los deportes que quería hacer y mis padres me dijeron que tenía que tomar una decisión. Al final me decanté por el baloncesto porque toda mi familia había jugado al baloncesto y ya empezaba un poco a destacar. Fue sobre los diez años, ahí tuve que tomar la decisión.
¿Cómo ves que hoy en día se haya profesionalizado mucho el tema de la Minicopa? ¿Se está perdiendo un poco la esencia esa de que disfruten al analizar cada jugador como si fuera profesional?
Es una gran pregunta y es un gran debate que ahora, visto desde otra perspectiva diferente a la del nivel profesional, muchas veces comentamos. Cuando empecé, mi formación era formación de deportista, no me exigían ganar el trofeo para esa formación. Es cierto que ahora se está viendo que estamos generando demasiada presión en los niños muy pequeños y lo veo con mi hijo que está empezando a jugar a fútbol. A veces se nos está olvidando el tema de formar y nos estamos solo centrando en el tema de ganar para formar.
Creo que eso, desde mi punto de vista, es una decisión errónea. También son decisiones que van tomando los clubes y la gente que está trabajando en la formación, pero es un debate que necesita muchísimo trabajo y esperemos que apostemos más porque los niños se lo pasen bien a estas edades, que disfruten, que es un poco lo que inculco yo cuando tengo mi campus de baloncesto. Buscamos que la gente no se centre en 'va a ser un Rudy Fernández'; no, al principio tienes que ser tú, seguir mejorando y disfrutando del camino que es muy bonito.
Recientemente ha salido un documental de Pau y Marc Gasol contra la obesidad infantil, ellos son impulsores y pelean contra este problema. ¿Se está perdiendo hablar del deporte como salud?
El otro día estuve cenando con Pau y me dijo que habían hecho un trabajo muy bueno a nivel de visibilidad del problema en España y ahora creo que estamos en el momento idóneo de hacer entender a la gente, tanto a los padres como sobre todo a los niños, que el practicar deportes es salud. Eso para mí es esencial y es lo que te he dicho antes.
Creo que vamos creciendo a nivel de herramientas y a nivel de visibilidad con las redes sociales. Ese tipo de visibilidad es buena, pero hay otras que hacen lo contrario y vamos a intentar tener esa educación alimenticia, en la que la Fundación Gasol se está involucrando muchísimo. Hay que ayudar a generar esa sintonía para que los niños salgan a la calle, hagan deporte y no estén obsesionados solo con los medios, con la televisión, con los videojuegos, etcétera.

Cambiando de tema, te retiraste el pasado verano, ¿cómo es la vida de un jubilado a los 40 años?
La verdad es que muy buena. Estoy encantado, tengo muy buen color para estar en mayo (se ríe). Durante el último año en activo pensaba que iba a estar relajado, porque iba a estar sin hacer baloncesto, pero estoy de lado a lado. Eso también es bueno porque la gente me muestra todo su cariño. Luego, estoy haciendo cositas también a nivel empresarial, a nivel business porque es muy importante seguir moviéndote. Luego estoy jugando a golf, un nuevo hobby de jubilado porque tanto Pau como Sergio Rodríguez y Rafa Nadal me engancharon muchísimo, me pican y le estoy dando bastante.
Se ha despedido de la selección Sergi Llull, ¿qué representa para España esa marcha?
Creo que ese paso ha sido seguramente muy meditado porque al final la familia tira muchísimo. Yo creo que tiene todavía muchísimo baloncesto que dar, pero es cierto que cada vez las temporadas son mucho más largas, muchísimo más exigentes claro y estamos hablando que el compromiso que ha tenido Sergi durante todos estos años con la selección ha sido muy top´.
Creo que ahora mismo es normal que Sergi quiera dar ese paso atrás, y dar el testigo a las nuevas generaciones que vienen con mucha fuerza. Y ser papá, porque tiene tres hijas, una familia y los veranos, que son el el momento de disfrutar con ellos, él se iba con la selección. Ahora tendrá esos momentos de descanso y de familia, que se lo merece.
Hablando de la selección, ¿cómo ves el futuro?
A mí me gustaría que el tiempo se parara y seguir jugando baloncesto porque al final me ha dado la vida y me lo he pasado muy bien durante todos estos años, pero no es así. Hay que tener calma y paciencia, aunque muchas veces la sociedad va muy rápido y no se acaba de tener esa paciencia. Ahora viene un momento de paciencia, de tranquilidad, vienen jugadores jóvenes que ya han participado en competiciones importante, como el Eurobasket o la Euroliga. La nueva camada que está llegando viene haciendo muy buenas temporadas en categorías inferiores con campeonatos mundiales y Eurobasket.
Esa transición tiene que ser poco a poco, sin pensar en el pasado ni en estas dos últimas décadas que yo he pasado con la selección española, que ha sido algo histórico y no sabemos si se va a volver a repetir. Vamos a intentar dejar que estos chicos trabajen sin ningún tipo de presión. Al final es eso, si no tienen presión, si van poco a poco y si trabajan y cogen los conceptos que quiere Scariolo todo irá mucho mejor y seguro que disfrutaremos.
¿Te pica el gusanillo de no haber coincidido para jugar el Eurobasket del 2029 y el partido del Santiago Bernabéu?
Lo hablaba con Sergi durante la despedida y estábamos comentando 'qué mala suerte el poder no vivir algo histórico'. Al final Madrid es nuestra casa, hemos vivido durante muchísimos años aquí, he jugado durante muchos años en el Real Madrid y viendo como aficionado el Bernabéu, cómo ha quedado y en la forma en la que quieren hacer ese partido de presentación del Eurobasket 2029… Es que va a ser algo histórico y, por supuesto, me gustaría poder estar en la pista, pero seguramente esté fuera de ella disfrutando de ese momento.

Que os dejen hacer un amistoso a vuestra generación, yo creo que lo llenáis.
Imagínate, el año que viene se cumplen 20 años de Saitama y no sería una mala idea, pero claro ya somos mayores y llenar 80.000 personas del Bernabéu sería más complicado. Pero bueno, es un buen punto para poder hablarlo la verdad (ríe).
¿Cómo ves la fuga de talento europeo a la NCAA?
Es también un buen debate. Es complicado de gestionar porque la verdad es que tienen presupuesto y una forma de trabajar a la que es difícil decir que no. Te estás formando académicamente, te vas a Estados Unidos, aprendes una nueva cultura, tienes dinero, una competición... y es difícil competir contra ellos, pero esperamos que desde aquí, desde Europa, donde estamos viendo que se están yendo muchísimos jugadores, la FIBA pueda intentar hacer entender, tanto a College como a Estados Unidos, que hay que intentar cuidar también nuestras categorías inferiores para que puedan seguir formándose. Pero es complejo y va a ser bastante difícil.
¿Qué va a ser de Rudy Fernández en el futuro?
No lo sé la verdad. Yo voy día a día, lo disfruto como puedo y estoy muy orgulloso de hacerles de Uber a mis hijos yendo a gimnasia, a practicar deporte, porque mi hijo hace golf, fútbol y en ese sentido me siento muy afortunado. Solo pienso ahora mismo en el día a día y, por supuesto, en un futuro me gustaría estar vinculado al baloncesto porque al final lo he mamado desde pequeño y he aprendido muchísimo.

¿Te verías de presidente de la Federación?
No, no, yo creo que ahora mismo tenemos una muy buena presidenta, que acaba de conseguir algo histórico en el Bernabéu y creo que está haciendo un trabajo espectacular. Además, viene de haber tenido a Jorge Garbajosa, que creo que ha sido un gran presidente y ahora es presidente de FIBA Europa, así que en ese sentido estamos muy bien cubiertos.
Yo estoy para lo que necesiten y les voy a apoyar siempre porque ha sido mi casa durante 24 años y, en ese sentido, estoy muy agradecido a la Federación y a la presidenta porque creo que está haciendo un trabajo espectacular.