Grande-Marlaska: "ETA fue solo violencia irracional y su cese definitivo, una derrota sin paliativos"
"No se puede cambiar el pasado, pero sí repararlo".
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, se ha referido a la banda terrorista ETA como un “violencia irracional” cuando se cumplen diez años de su desarme de la banda.
Durante su intervención, Marlaska también ha mencionado que el cese definitivo de la banda fue “una derrota sin paliativos, porque no alcanzaron ninguno de sus objetivos políticos”.
“En un Estado de derecho no hay contraprestaciones que vulneren la ley”, ha zanjado el ministro, quien ha insistido en que son las víctimas del terrorismo el “baluarte” de ese Estado de derecho. Por ello, “no hay ninguna contrapartida”, ni con los presos ni con nada.
El titular de la cartera ha participado en un acto homenaje a las víctimas de la banda en el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo en Vitoria (Álava) en el que ha recordado que en la última década, las fuerzas de seguridad españolas y francesas han detenido a 241 terroristas y se han localizado 35 depósitos de armas y explosivos de la banda.
Sobre las víctimas, el ministro ha expresado que su primera obligación es no olvidar los 2.500 atentados y más de 850 asesinados. Y ha explicado que “una sociedad sin memoria, es una sociedad sin futuro”.
El director del Memorial, Florencio Domínguez, ha recordado que una década después del fin de ETA “todavía existe en la sociedad vasca quien no es capaz de asumir el suelo ético que aprobó el Parlamento Vasco en 2013”. Ha citado que esa declaración señala que “la paz y la convivencia requieren el reconocimiento de la injusticia de la violencia, el reconocimiento del daño causado y la dignidad de las víctimas, todas ellas merecedoras del derecho a la verdad, la justicia y la reparación”.
