La estafa política del PP

La estafa política del PP

La semana de gloria organizada por el partido deja una estela de roña política y de mensajes de rencor.

Pablo Casado.EFE

La semana de gloria organizada por el PP para relanzar a su líder en una convención itinerante deja una estela de roña política y de mensajes de rencor que nada ayudan a normalizar las relaciones con el principal partido de la oposición. Hemos visto que Pablo Casado se rodeó de Nicolás Sarkozy, al que puso como ejemplo de gestión, y al día siguiente era condenado a un año de cárcel por malversación.

Las mujeres han brillado por su ausencia en este encuentro del PP, porque la igualdad entre mujeres y hombres nunca ha estado en su agenda. Hasta una de sus ponentes les sacó los colores en público, cuando recordó que allí había menos mujeres que en una empresa del Ibex, que ya es decir.

El escritor Mario Vargas Llosa se sumó a los despropósitos diciendo que no hay que votar en libertad, sino votar bien, un mensaje con tufo fascistoide. Días después aparecía su nombre entre los beneficiarios de operaciones de fraude fiscal en los Papeles de Pandora.

Y por si no hubiera bastante volvieron a exhibir a Rajoy y a Aznar. El primero dice no hay dos sin tres, cuando su gobierno se recordará siempre por la subida de impuestos, empleos precarios y pobreza laboral, recortes en educación, sanidad, pensiones, y una amnistía fiscal para los defraudadores. De Aznar es sabido que fue el presidente que nos llevó a una guerra y nunca pidió perdón.

Y para la clausura eligen Valencia, cuna de la corrupción del PP y de robar a manos llenas, con Camps, Fabra, Zaplana y tantos otros.  Sus mentiras se desmontan con argumentos. Ahí va.

Promesa de empleo. El mes de septiembre ha sido récord en bajada del paro. Más de 80.000 nuevas cotizaciones a la Seguridad Social. Empleo de calidad, no pobre y mísero como hizo el PP. Por cierto, en esta crisis los Ertes (creación del Gobierno Zapatero) han sido la salvación de empresas y trabajadores. La derecha votó que no, pero ahí están las cifras del Gobierno progresista y de coalición que preside Pedro Sánchez.

Recibo de la luz. Prometen que lo bajarán, pero no concretan cómo. Fue el Gobierno de José María Aznar quien privatizó Endesa, la empresa por la que luego fichó como “asesor externo” con un sueldo de 200.000 euros mensuales. Este Gobierno que preside Pedro Sánchez ha rebajado el Iva, ha creado un bono social, eliminó el impuesto al sol que ellos crearon y a final del año nuestros recibos serán iguales a los de 2018.

Pensiones. Dejen de mentir. Si hay alguien que va a asegurar las pensiones es este Gobierno. Subida al IPC y no al 0,25 como hacían ellos y que supuso para nuestros pensionistas una pérdida considerada de poder adquisitivo.

España se rompe. Eso es lo que les gustaría a ellos para sacar rédito político. No les importa la convivencia entre españoles. ¿Qué hicieron ellos en los siete años de Rajoy? ¿Cuál es su plan para Cataluña? Es la división y la confrontación, porque así tapan la incompetencia más que demostrada para resolver los problemas políticos que crearon atizando la división entre territorios para sacar beneficio electoral.

Traer a Puigdemont a España. Debe ser que en el máster no le enseñaron a Casado que hay que respetar las decisiones judiciales. Porque no es un gobierno quién decide, son los tribunales de la Unión Europea. Se llama separación de poderes y es de primero de política.

Gobierno radical comunista y con nacionalistas. Ya se han olvidado que Aznar hablaba catalán en la intimidad, cuando necesitaba los votos de los diputados del corrupto Jordi Pujol. Ese que dicen que es el Gobierno más radical de Europa es el que ha tenido el reconocimiento de la Unión Europea sobre la gestión de las vacunas, fondos europeos y política internacional. Ya se han olvidado de la visita a Torrejón de Ardoz de la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen, que felicitó públicamente a nuestro país y a Pedro Sánchez. Por cierto, el PP ha dicho que pactará con Vox, un partido de ultraderecha que niega la violencia de género, que trata a las mujeres como brujas. No sé si eso sí que es ser radical, pero lo que sí sé es que eso es pactar con el fascismo. La derecha europea nunca pactaría con la ultraderecha. En toda Europa se hace un cordón sanitario, por el bien de su ciudadanía y de la democracia.

Los jueces deben elegir a los jueces. Esa es su condición para renovar el Consejo General del Poder Judicial, pero es que esto ya es así, no hay que tocar ninguna ley. Lo que no quiere el PP es aplicar la Constitución, si con ello puede perder el control de ciertos tribunales muy conservadores. ¡Viva la democracia y la separación de poderes!

Tanta mentira acaba convirtiéndose en estafa política. Deben pensar que tienen impunidad y que pueden mentir, porque después se confiesan. Sus ansias de poder no les deja ver la realidad y pueden acabar atragantándose. Pedro Sánchez es el presente y el futuro, aunque Casado diga que es el pasado, en otras de las frases que le prepararon. Les aconsejo mucha calma, porque este Gobierno es fuerte y faltan más de dos años para las elecciones. Se les puede hacer interminable.