Las 24 horas en las que la guerra estalló dentro de Rusia

Las 24 horas en las que la guerra estalló dentro de Rusia

El jefe del Grupo Wagner se ha rebelado contra la cúpula militar rusa tomando la ciudad de Rostov del Don y forzando una marcha hacia Moscú que finalmente ha aceptado detener y regresar a sus bases.

Las tropas de los mercenarios del Grupo Wagner montan un tanque en el que se lee 'Siberia' en una calle del centro de Rostov.EFE/EPA/ARKADY BUDNITSKY

La tensión acumulada durante meses dentro de Rusia ha estallado en las últimas 24 horas. El jefe del grupo de mercenarios Wagner, Yevguéni Prigozhin, se ha rebelado finalmente de forma abierta contra la cúpula militar del régimen ruso de Vladimir Putin. Y lo ha hecho tomando la decisión de cruzar la frontera ucraniana, tomar la ciudad rusa de Rostov del Don y forzar una marcha hacia Moscú que finalmente ha aceptado detener tras la mediación del presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko, y volver a sus bases.

En los últimos meses, Prigozhin se ha convertido al mismo tiempo en una de las voces internas más críticas contra el ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, y en uno de los ejecutores más relevantes en la ofensiva militar en Ucrania. "Estamos en el Estado Mayor, 7.30 hora de Moscú (04.30 GMT), controlamos las instalaciones militares de Rostov, incluyendo el aeródromo", afirmó en un vídeo publicado en su cuenta de Telegram a primera hora de este sábado. 

Previamente, la noche del viernes, el jefe de Wagner acusó a Rusia de bombardear sus bases y amenazó con responder a esos ataques. Y cumplió su promesa durante la madrugada de este sábado con una rebelión armada, un acto que supone el mayor desafío hacia el presidente ruso en los más de 23 años que Putin lleva en el poder. 

Esta guerra interna, además, se produce mientras las Fuerzas Armadas rusas afrontan otra guerra en Ucrania, que se encuentra en uno de los momentos decisivos de la invasión tras el inicio a principios de mes de la esperada contraofensiva por parte de las tropas de Kiev. 

Marcha atrás

Cuando la columna de vehículos blindados y tanques de la denominada Marcha de la Justicia de los mercenarios se encontraba a unos 300 kilómetros de Moscú, Prigozhin ha anunciado antes de las 20:00 de este sábado que sus tropas dan marcha atrás para evitar un derramamiento de sangre y regresan a sus bases. 

"Ahora ha llegado el momento en que se podría derramar sangre rusa. Por eso comprendemos la responsabilidad este derramamiento de sangre rusa de una de las partes y vamos a dar marcha atrás a nuestros convoyes y a regresar a los campamentos según el plan", ha añadido. Prigozhin ha aceptado una propuesta para detener su avance hacia Moscú del presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, quien había recibido previamente autorización del presidente ruso, Vladimir Putin, para emprender esta mediación.

Prigozhin "se irá a Bielorrusia", ha anunciado además a última hora de este sábado el Kremlin al comentar los detalles del acuerdo. "El caso penal que le fue abierto será cerrado y él (Prigozhin) se irá a Bielorrusia", ha afirmado el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov.

A mediodía de este sábado, las autoridades de la ciudad de Lipetsk, a unos 360 kilómetros al sur de la capital rusa, habían pedido a los vecinos que no salieran de sus casas ante el avance por esa región de una columna de vehículos de Wagner hacia el norte. Es uno de los puntos más cercanos a Moscú en el que se ha visto a los paramilitares.

De hecho, las autoridades locales informaron de se han utilizado excavadoras para cavar zanjas en las principales autopistas de Lipetsk para intentar frenar el avance de los mercenarios. "El tráfico está suspendido en algunas carreteras de nivel regional. En varios puntos se ha dañado deliberadamente el firme con excavadoras. Se han adoptado medidas radicales para impedir completamente el paso de vehículos por las autopistas", informaron. 

Antes ya se había informado de cortes en dos de las entradas a la ciudad de Lipetsk: Chapliginski y Lebedianski. Además se había restringido el tráfico en la autopista M-4 que une Rostov con Moscú y se había pedido a la población no abandonar sus hogares.

El desafío más significativo

La inteligencia militar británica ha asegurado este sábado que Rusia afronta el "desafío más significativo" en los últimos tiempos y la "lealtad" de sus fuerzas de seguridad será "clave" para el desenlace de la crisis. "Durante las próximas horas, la lealtad de las fuerzas de seguridad de Rusia, y especialmente las de la Guardia Nacional Rusa, serán clave para cómo se va a desarrollar la crisis", tuiteó el Ministerio de Defensa. 

Por su parte, la investigadora del CIDOB, Carmen Claudine, ha advertido en la Cadena SER de que todavía "es difícil especular". "Hay que tener en cuenta que Prigozhin, aun teniendo un ejército a su mando, tendrá en contra de él absolutamente todo el aparato del Estado y un aparato del Estado que, si de algo sabe más que de dar una vida decente a su gente, es de reprimir y de aplastar", ha señalado.

En cuanto a la situación en la que queda Putin, ha resaltado que es curiosa. "Se verá en la situación de crisis más clara, más aguda, de crisis interna que se haya dado en Rusia desde que Putin haya llegado al poder. Ahora se verá quiénes son quienes están del lado de Putin, que me extrañaría mucho que no sea la absoluta mayoría", ha explicado.

Mientras, la investigadora principal para Rusia, Eurasia y los Balcanes del Instituto Elcano, Mira Milosevich-Juaristi, ha señalado a EFE que "Prigozhin ha perdido el contacto con la realidad rusa". "No veo probabilidad de que haya un golpe y llegue al poder", ha dicho la experta, que ha calificado la situación de "grave" y "desestabilizadora para toda la región".

"Putin siempre ha gobernado fomentando la rivalidad entre facciones, pero se le ha ido la mano", ha señalado. Milosevich-Juaristi también se ha referido al discurso del presidente ruso calificando de "traición" la sublevación del líder de Wagner y comparando los hechos con lo sucedido en 1917 durante la Primera Guerra Mundial. "Significa que se ve a sí mismo como el zar traicionado", ha dicho.

En cuanto a Prigozhin, hasta ahora protegido de Putin, estima que puede haber "perdido la cordura" por el desgaste de la guerra en Ucrania. Sin embargo, matiza que es difícil hacer una valoración en profundidad por falta de información. "Prigozhin dijo que ha sido atacado por fuerzas rusas, pero el problema es que no sabemos muy bien lo que está pasando: no olvidemos que Rusia ha expulsado a la mayor parte de los periodistas", ha recordado.

Moscú "en alerta máxima"

Antes del cambio de rumbo del líder de Wagner, el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, calificó de "difícil" la situación en torno a la capital debido a la rebelión armada y decretó el lunes próximo día no laborable. "Queridos ciudadanos, en Moscú se ha declarado un régimen de operaciones antiterroristas. La situación es difícil", escribió en su canal de Telegram.

Y explicó que, "para minimizar los riesgos", decidió "declarar el lunes un día no laborable, con excepción de las autoridades y empresas de ciclo continuo, el complejo militar-industrial y los servicios de la ciudad". "Los servicios municipales están en alerta máxima", recalcó el regidor.

Qué ha dicho Putin... y la respuesta de Prigozhin

Putin reaccionó a la rebelión esta mañana en un mensaje televisado de cinco minutos y medio y consideró los hechos como "una puñalada por la espalda". El presidente ruso acusó de "traición" a los mercenarios, afirmó que serán castigados y anunció que había dado las órdenes necesarias al ejército para restablecer el orden.

"El que organizó y preparó la rebelión militar traicionó a Rusia y responderá por eso", afirmó, y recalcó que el jefe de Wagner "empuja al país a la anarquía y el fraticidio, a la derrota y a la capitulación" frente a Ucrania y Occidente. "Como presidente y comandante en jefe, como ciudadano ruso, haré todo para defender el país. Defender el orden constitucional, la vida y la seguridad, la libertad de los ciudadanos", enfatizó.

Prigozhin, atrincherado en Rostov, respondió a Putin que sus hombres no son traidores y no se entregarán a la autoridades. "Sobre aquello de traición a la patria, el presidente se equivocó profundamente. Somos patriotas. Hemos combatido y combatimos (...) y nadie piensa entregarse por exigencia del presidente, del Servicio Federal de Seguridad (FSB) o quien sea", subrayó.

Mientras, en Ucrania

Por su parte, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha asegurado que el presidente ruso se ha ocultado en un búnker lejos de Moscú ante el avance de las fuerzas de Wagner. "Lo digo en ruso. El hombre del Kremlin evidentemente tiene mucho miedo y probablemente está escondido. Estoy seguro que no está ya en Moscú. Llama a alguien, ruega algo. Sabe que tiene miedo porque ha sido él mismo quien creó esta amenaza", ha afirmado Zelenski en un vídeo difundido en redes sociales.

"Todo el mal, todas las pérdidas, todo el odio que difunde y solo puede correr. Cuanto más corra entre sus búnkeres, más perderéis todo el mundo con conexiones con Rusia", ha añadido. Zelenski, además, ha destacado que "los jefes de Rusia no controlan nada". "Caos absoluto. Ausencia completa de cualquier tipo de predictibilidad", ha indicado. En cuanto a la presencia rusa en Ucrania, ha asegurado que "cuanto más tiempo esté esta persona en el Kremlin, más catástrofes habrá".

Mientras las incógnitas se acumulan sobre lo que pasará en suelo ruso, desde Ucrania han afirmado haber emprendido una nueva ofensiva en el este del país para recuperar territorio ocupado por las tropas rusas. Así lo ha informado la viceministra de Defensa, Hanna Maliar. 

Maliar ha resaltado que las fuerzas rusas han intentado avanzar en las direcciones de Kupiansk, Limansk y Marinsk, pero "han fracasado", según recoge la agencia de noticias ucraniana UNIAN. Asimismo, Maliar ha dado cuenta de "intensos combates" en el sur con unas fuerzas rusas "a la defensiva" y realizando "grandes esfuerzos" para frenar la ofensiva de las Fuerzas Armadas ucranianas. El informe de Maliar incluye además "pérdidas significativas" en personal, armas y equipo por parte de la Federación Rusa.

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Ana Roca es redactora en 'El HuffPost'. Graduada en Periodismo y Comunicación Audiovisual por la Universidad Carlos III, ha trabajado en la Agencia EFE y en el diario El País, donde se formó en la Escuela del periódico. Puedes contactar con ella en ana.roca@huffpost.es.