Por favor, habilita JavaScript para ver los comentarios de Disqus.
Alertan de que Rusia cambia las reglas del juego con un movimiento que supera la Segunda Guerra Mundial

Alertan de que Rusia cambia las reglas del juego con un movimiento que supera la Segunda Guerra Mundial

La guerra de desgaste da paso a una ofensiva diseñada para vaciar los arsenales de Ucrania a golpe de drones baratos y misiles sincronizados.

Restos de un dron caído tras un ataque en la guerra en Ucrania.
Restos de un dron caído tras un ataque en la guerra en Ucrania.REUTERS

La estrategia militar de Moscú ha cambiado y, con ella, la naturaleza del campo de batalla. El secretario del comité de defensa del Parlamento ucraniano, Romanas Kostenko, ha advertido de que el ejército ruso ha modificado por completo su táctica ofensiva y ahora lanza "varios misiles sobre un mismo objetivo, de forma simultánea" para garantizar la destrucción total y forzar a Ucrania a agotar rápidamente sus sistemas antiaéreos, tal y como recoge la web lituana Delfi.

Kostenko ha detallado que Rusia ya ha disparado más de 7.000 misiles y más de 50.000 drones Shahed sobre territorio ucraniano. Según sus palabras, este volumen de ataques “ni siquiera se puede comparar con la Segunda Guerra Mundial” y hace prácticamente imposible mantener un escudo aéreo capaz de responder eficazmente. “Es un ataque masivo, continuo, diseñado para erosionar nuestra capacidad de respuesta y forzarnos a malgastar recursos carísimos en amenazas baratas”, ha asegurado.

El parlamentario ha recordado que la mayoría de los sistemas actuales de defensa aérea, como los Patriot estadounidenses o los S-300 soviéticos, fueron concebidos durante la Guerra Fría para abatir objetivos de alto valor estratégico. “Cada misil interceptor cuesta millones de dólares. En cambio, un Shahed iraní apenas llega a los 30.000 o 100.000 dólares. Económicamente, es un sinsentido”, ha advertido.

Kostenko ha subrayado que ninguna nación puede sostener indefinidamente el uso de estos sistemas contra una avalancha constante de drones desechables. De ahí que Ucrania esté acelerando la producción de tecnologías más baratas, como los drones interceptores. “Necesitamos fabricar muchos más. Son mucho más económicos y pueden combatir eficazmente a los Shahed rusos”, ha insistido.

Según sus datos, Rusia puede llegar a lanzar hasta 500 drones en un solo día, aunque este tipo de ofensiva solo puede repetirse cada tres o cuatro jornadas por falta de stock y logística. El objetivo del Kremlin, según el político ucraniano, es crear una presión continua sobre el sistema antiaéreo ucraniano, llevándolo al límite.

Frente a esta ofensiva de desgaste, el Gobierno de Zelenski ya ha empezado a desplegar drones interceptores propios. En uno de los ataques recientes, estos nuevos dispositivos lograron abatir una docena de vehículos aéreos rusos no tripulados. Además, según datos de Defense Express, la producción nacional de drones en Ucrania ha aumentado un 900 % en el último año, pasando de 20.000 unidades mensuales en verano de 2024 a más de 200.000 actualmente.

Sin embargo, analistas del Atlantic Council y del Georgetown Security Studies Review han advertido de que esta respuesta tecnológica todavía necesita una base más sólida: una estrategia a largo plazo, más inversión en innovación y una mayor protección legal para las patentes nacionales. Según sus estudios, Ucrania registra muchas menos solicitudes de propiedad intelectual que Rusia u otros países, lo que podría limitar el crecimiento de su industria armamentística.

“El futuro pasa por automatizar los sistemas de detección, construir una red unificada de radar y mejorar los drones defensivos. Si lo logramos, pronto derribaremos cada día más Shahed”, ha pronosticado Kostenko. Mientras tanto, Rusia ya ha dejado claro que las reglas del juego han cambiado.