El vecino europeo de Putin corta sus últimos lazos con Rusia
Finlandia anuncia un plan para convertir todas las rutas ferroviarias del país al ancho de vía europeo. Se trata de un paso hacia la independencia del legado ruso y el fortalecimiento de la cooperación con los países nórdicos. También en Defensa.

La ministra de Transporte finlandesa, Lulu Ranne, lo tiene claro: su país no puede seguir siendo una zona que se beneficie del legado de Rusia en el norte de Europa, en un contexto de invasión de Ucrania y siendo como es la Federación Rusa una amenaza para la seguridad europea. "¿Queremos quedarnos en Rusia para siempre? No queremos", ha afirmado en una rueda de prensa. Y eso llega hasta el transporte.
En la actualidad, el tráfico ferroviario transfronterizo no es posible entre Finlandia y Rusia, debido a que en el lado finlandés el ancho de vía (1.524 mm), que data del siglo XIX (cuando el territorio finlandés formaba parte del Imperio ruso), es casi 89 mm más ancho que el ancho europeo (1.435 mm) y más cercano al ancho ruso (1.520 mm).
Así que Ranne ha presentado el nuevo proyecto de la empresa nacional de trenes, Rail Nordica, que implica la construcción de una nueva línea ferroviaria en el norte del país. Atravesará el Golfo de Botnia y conectará las ciudades finlandesas de Oulu, Rovaniemi y el puerto de Kemi con la ciudad sueca de Haparanda, en el fronterizo río Torne, y desde allí al centro minero de Kiruna y luego al puerto noruego de Narvik. La inversión, destacan las autoridades, es importante desde el punto de vista de las Fuerzas Armadas finlandesas y de la OTAN. En Laponia, cerca de Rovaniemi, hay una base militar y un campo de entrenamiento, lo que amplifica el proyecto.
Durante su reunión en Helsinki, los ministros de transporte nórdicos emitieron una declaración conjunta en la que afirmaban que "la movilidad militar, la preparación civil y la seguridad del suministro son de gran importancia en el contexto del desarrollo de una estrategia común para los sistemas de transporte por parte de los países".
Según la ministra Ranne, la construcción de una línea ferroviaria según los estándares europeos y su inclusión en el programa de la Red Ferroviaria Transeuropea (TEN-T) no puede limitarse sólo al norte de Finlandia, sino que debe abarcar también la parte sur del país, especialmente porque -como destacó- en los países bálticos se está construyendo Rail Baltica (una ruta ferroviaria de alta velocidad desde Tallin, Estonia, a través de Riga hasta la frontera con Polonia) según los estándares europeos.
Un análisis elaborado en 2023 por el Ministerio de Transporte muestra que reconstruir todas las líneas ferroviarias de Finlandia al ancho de vía europeo (1.435 mm) haría "más daño que bien" y los costes del proyecto serían "demasiado altos".
La longitud total de la red ferroviaria en Finlandia es de casi 6.000 kilómetros, de los cuales más de la mitad están electrificados.