Europa se prepara para lo peor tras la última determinación contra Rusia
La lucha de los países bálticos por ganar independencia frente a Putin llega al suministro eléctrico.

Los países bálticos comienzan a prepararse ante los posibles ataques a sus infraestructuras por parte de Rusia después de que hayan decidido desacoplarse de una red eléctrica conjunta de la era soviética con Rusia y Bielorrusia.
"Estonia se ha preparado para muchos posibles escenarios de riesgo con respecto a nuestra salida de BRELL, incluidas las amenazas cibernéticas", advirtió el jefe del Centro de Seguridad Cibernética de Estonia, Gert Auväärt, al diario POLITICO.
Los temores surgen después de que Estonia, Letonia y Lituania anunciasen que desactivarían el interruptor de la red eléctrica regional conocida como BRELL el próximo 9 de febrero. En su lugar, se conectarán a una red de la Unión Europea, en un paso más hacia la independencia de Rusia.
De hecho, las autoridades y expertos han explicado a las compañías energéticas cómo deben actuar en el caso de que ocurra un incidente grave para que el suministro energético no se vea afectado, según afirmó Auväärt, que añadió que se encuentra trabajando junto con Letonia y Lituana para ver cómo afrontar esta amenaza de manera conjunta.
Siguiendo esta línea, uno de los portavoces del Ministerio de Energía de Lituania, ha defendido que han comenzado "medidas y planes adicionales para aumentar nuestra preparación". Además, los países bálticos no solo han iniciado estrategias para evitar ciberataques, sino que también los operadores de las redes están "limitando el acceso a sus instalaciones" y estableciendo "nuevos sistemas antidrones y barreras de protección física" en las zonas clave.
Junto a la amenaza del corte de suministro eléctrico, los países bálticos también se enfrentan a cortes en los cables submarinos en el Mar Báltico provocados presuntamente por Rusia.
"Probablemente podría ser el mensaje intencionado de que los países bálticos y nórdicos no viven bien y no funcionan bien sin el abrazo de Rusia", subrayó el primer ministro estonio, Kristen Michal. "Nos desacoplaremos de todos modos... porque Rusia no es un socio fiable", añadió finalmente.