Expertos analizan los movimientos de los soldados rusos y concluyen: así será la ofensiva de verano de Putin
"El momento perfecto para avanzar", aseguran.

A pesar de todas las conversaciones de paz que se están llevando a cabo en Estambul, Rusia tiene planes para continuar su asedio este verano. Así lo ha confirmado el presidente de ese país, Volodímir Zelenski, en una comparecencia reciente, en la que ha puesto como prueba los 200 ataques que se producen de media diariamente.
Según publica el medio Ukrainska Pravda, con el fin de las lluvias, la nieve y el frío, el verano es el "momento perfecto para una nueva ofensiva", aunque "sólo un bando tiene el potencial para seguir con sus ataques": Rusia. Las fuentes del Ministerio de Defensa ucraniano, están "convencidos" de que la ofensiva se centrará principalmente en la región de Donetsk este verano.
De hecho, de acuerdo a la información difundida, de momento, la mayor parte de la región está bajo el control de Ucrania. De este modo, el ejército del Kremlin avanzará "rápidamente" en dos direcciones concretas: Kramatorsk y Pokrovsk.
En la primera dirección, Kramatorsk, la incursión rusia se ha pronunciado desde marzo. Esto se evidencia por varios factores, "el aumento de los bombardeos, un avance pequeño pero regular de los rusos desde el sur y el suroeste, y los primeros vuelos de drones FPV (fibra óptica) enemigos hacia la ciudad". De este modo, los rusos pretenden controlar la mitad de la aglomeración, "sin involucrarse en batallas urbanas". "Este puede considerarse su plan, como mucho, para este verano".
A pesar de centrar sus esfuerzos en el territorio anterior, el ejército ruso no abandonará las acciones ofensivas en dirección Pokrovsky. Según un interlocutor del ministerio de Defensa ucraniano y en unas declaraciones recogidas por el medio, se prevén acciones rusas al sur de esta ciudad entre finales de junio y principios de julio.
¿Qué debilita a las fuerzas ucranianas?
De acuerdo al medio ucraniano, las fuerzas de Kiev se enfrentan a cuatro problemas clave que complican su posición en el frente. En primer lugar, se contrapone a un reabastecimiento mínimo de personas, y, por otro lado, a una escasez de munición. "El consumo mensual de proyectiles en críticamente bajo".
Otros de los problemas recientes es que las fuerzas ucranianas se están quedando atrás respecto a los rusos en cuanto a número y calidad de los drones. "La mayoría de los vehículos ucranianos que llegan al frente no vuelan de fábrica; requieren modificaciones en talleres e inversiones personales de los combatientes". Por su parte, los rusos han aumentado "significativamente el número y la calidad de sus vehículos no tripulados".
Además, Ucrania "aún no ha comenzado a utilizar drones de fibra óptica a gran escala", reza la publicación. "Incluso las brigadas más potentes han empezado recientemente su entrenamiento para el uso de este tipo de drones. Son muy pocas las unidades que los utilizan".
Por último, el cuarto problema del Ejército popular de Ucrania es la microgestión por parte de Estado Mayor, y, en particular, de Oleksander Syrskyi. En la publicación, se critica que el comandante jefe "busca controlarlo todo", "desde el nombramiento de un nuevo comandante hasta la ubicación de una posición de infantería en una determinada dirección".
¡Mantente al día con El Huffpost! Sigue todas las noticias desde tu móvil en nuestra APP. Puedes descargarla tanto para Android como iOS.