Irán juega al límite con el uranio

Irán juega al límite con el uranio

La Junta de Gobernadores del OIEA adoptó una resolución crítica con Irán en la que le exige más cooperación.

El ministro de Asuntos Exteriores iraní, Hossein Amir Abdollahian, y el director general de la Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, en Teherán, en mayo.Iranian Ministry of Foreign Affairs/Anadolu via Getty Images

Irán condenó la resolución que adoptó en su contra la Junta de Gobernadores del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) por su presunta falta de cooperación y aseguró que continuará con el "pacífico" desarrollo de su programa nuclear.

"La República Islámica considera que la presentación y aprobación de esta resolución es una acción política no constructiva y una continuación de las políticas fallidas de algunos países occidentales y un intento de abusar de mecanismos internacionales contra países independientes”, afirmó el Ministerio de Exteriores iraní en un comunicado.

La diplomacia iraní aseguró que está comprometida con “continuar la cooperación técnica" con el Organismo Internacional de Energía Atómica en el marco de los derechos internacionales y el Tratado de no Proliferación, y aseguró que seguirá adelante con su programa.

“La aprobación de esta resolución no tiene efecto en la voluntad de la República Islámica de continuar la pacífica explotación de la energía nuclear y continuar con sus planes de desarrollo nuclear de acuerdo con los derechos del país según los acuerdos internacionales”, indicó el ministerio.

Por su parte, el portavoz de la Agencia de la Energía Atómica de Irán (AEAI), Behrouz Kamalvandi, llamó a los países occidentales a “tomar el camino de la interacción y la cooperación”, informó la agencia IRNA.

La Junta de Gobernadores del OIEA adoptó la semana pasada una resolución crítica con Irán en la que le exige más cooperación para determinar los orígenes de trazas de uranio en instalaciones no declaradas en su programa nuclear, mientras produce combustible nuclear a niveles cercanos al uso militar.

Además, Irán restringe desde hace meses el acceso de algunos de los inspectores del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) más experimentados, lo que está mermando la capacidad de esta agencia de la ONU para verificar que su programa nuclear es exclusivamente pacífico.

La resolución fue presentada por el Reino Unido, Francia y Alemania y fue apoyada por 20 países, mientras que Rusia y China, los dos principales aliados de Irán, votaron en contra, y otros doce países se abstuvieron.

Un día antes de la aprobación del texto, el jefe de la Agencia de la Energía Atómica de Irán (AEAI), Mohamed Eslami, advirtió que Teherán “responderá definitivamente a la aprobación de una resolución antiiraní contra su programa nuclear", aunque aún no han anunciado medidas.

Irán firmó un acuerdo nuclear con Alemania, Francia, Reino Unido, Rusia, China y Estados Unidos que de manera indirecta limitaba el programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de las sanciones.

Estados Unidos abandonó el pacto unilateralmente en 2018, un año después Irán comenzó a incumplir sus compromisos y ahora el país persa está enriqueciendo y acumulando cantidades significativas de uranio enriquecido con una pureza del 60%, cercano ya al nivel necesario del 90% para fabricar armas atómicas.