La Corte Internacional de Justicia advierte a Israel por "usar el hambre" como "método de guerra" en Gaza y le marca varias obligaciones humanitarias
El principal tribunal de la ONU asegura que el estado israelí tiene la obligación de "garantizar las necesidades básicas" de la población tras la firma del alto el fuego y exige dejar trabajar a la UNRWA. Israel insiste sin pruebas en que la agencia de la ONU cooperó con Hamás el 7-O y aún hoy.
La Corte Internacional de Justicia de La Haya exige a Israel "garantizar las necesidades básicas" de la población en Gaza y prohíbe "utilizar el hambre de la población civil como método de guerra".
El principal tribunal de Naciones Unidas estipula que Israel también tiene la obligación de "aceptar y facilitar" la entrada de planes de ayuda humanitaria, no bloqueando su llegada a la Franja. La Corte precisa que esos programas de 'obligada aceptación' incluyen tanto los de Naciones Unidas como los de "sus entidades".
El presidente del tribunal Yuji Iwasawa, ha precisado que "cubrir las necesidades básicas" de los gazatíes incluye por parte de Israel, a la que define como "potencia ocupante" no sólo dar paso libre a las ayudas externas, sino ofrecer "los medios necesarios para garantizar su supervivencia".
Además, ha reivindicado que, precisamente desde octubre de 2023, la agencia de la ONU ha sido "una pieza fundamental para la respuesta humanitaria" en el enclave y ha servido a los refugiados palestinos para obtener "ayuda urgente" y salvar sus vidas. "Israel tiene la obligación de no impedir las operaciones de las entidades de la ONU, de otras organizaciones y de terceros países, así como de cooperar de buena fe con ellas", ha añadido.
"Por todos estos motivos, el tribunal, de forma unánime, considera que tiene jurisdicción para emitir este documento", ha apuntado, antes de afirmar que "Israel debe cumplir sus obligaciones bajo el Derecho Internacional como potencia ocupante". Entre ellos, garantizar "que la población palestina de los territorios ocupados" cuenten con los suministros esenciales para desarrollar su vida diaria, citando agua, ropa, medicamentos y alimentos, entre otros.
El postulado de la CIJ insta igualmente a Israel a "respetar la prohibición a la deportación y traslado forzoso de la población de los Territorios Palestinos Ocupados" y el "derecho de los presos palestinos detenidos por Israel a ser protegidos y recibir visitas del Comité Internacional de Cruz Roja".
"El libre movimiento del personal de Naciones Unidas en la zona para la entrega de esta ayuda también debe ser respetado por Israel", añade. Iwasawa dedica un capítulo a la UNRWA, que sigue sufriendo el bloqueo israelí a pesar de que las autoridades hebreas no han "ofrecido pruebas que respalden que su personal está vinculado con Hamás". "Estas acusaciones no se encuentran respaldadas".
Israel mantiene su bloqueo a la UNRWA
Desde Tel Aviv la respuesta no se ha hecho esperar. El Gobierno de Netanyahu ha cargado contra la "previsible" postura de la Corte, que califica como "otro intento político de imponer medidas políticas contra Israel bajo el pretexto del Derecho Internacional".
En un comunicado firmado por el portavoz de Exteriores, Oren Marmorstein, insisten en que "la CIJ debería haber denunciado la actividad terrorista en la que ha estado involucrada la UNRWA", llegando a repetir su tesis de que empleados de la UNRWA "participaron directamente" en la masacre del 7 de octubre "y continúan apoyando las operaciones terroristas de Hamás, todo ello bajo los auspicios de Naciones Unidas".