Marruecos asienta en el Sáhara su súpercentro de operaciones del tomate que amenaza a España
La justicia europea ya dictó una sentencia sobre ello.

Marruecos ha asentado en el Sáhara su súpercentro de operaciones del tomate que amenaza a España. Se trata de un hub hortofrutícola del que ya se produce un 20% del total de tomates que sacan adelante.
La situación es llamativa porque el Tribunal de Justicia de la Unión Europea dictaminó el pasado mes de octubre que los tomates cereza y los melones charentais recolectados en el Sáhara Occidental deben incluir en su etiquetado una mención que precise su procedencia de ese territorio y no de Marruecos.
La corte con sede en Luxemburgo indicó que cualquier otra indicación que se implante en estos productos "sería engañosa y podría inducir a error al consumidor".
El Tribunal de Justicia de la UE aseguró en un comunicado que, como productos importados a Europa, los melones y los tomates recolectados en el Sáhara Occidental deben indicar su país de origen en virtud de la normativa de la Unión.
Pese a la decisión judicial, Marruecos parece estar operando en los alrededores de Dakhla, en el Sáhara. A través de cuatro grandes grupos producen de forma indistinta una gran cantidad de tomates.
Según informa ABC, entre las empresas se encuentra Les Domaines Agricoles, sociedad a la que pertenece a un holding de Mohamed VI, la mayor agroalimentaria del país del norte de África.