Merz aboga por una "rápida" alianza con los socialdemócratas tras verse con Scholz: "No podemos tolerar ningún retraso"
El futuro canciller de Alemania confía en construir una "gran coalición" antes de Semana Santa. Para él, hay tres temas de "máxima urgencia": la política exterior, la migración y la economía.

Friedrich Merz aboga por construir una coalición de Gobierno junto a los socialdemócratas "rápidamente". El líder de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Alemania, tras una primera reunión con el canciller en funciones, Olaf Scholz, ha determinado sus intenciones y ha afirmado que "los temas se agolpan y no podemos tolerar ningún retraso".
"Parto de que podemos acordar un buen contrato de coalición con el Partido Socialdemócrata (SPD)", ha admitido el futuro canciller en una comparecencia, antes de una reunión del nuevo grupo parlamentario conjunto de la Unión Cristianodemócrata (CDU) y de la bávara Unión Socialcristiana (CSU) y tras entrevistarse durante hora y media en la Cancillería con Scholz, cuyo partido quedó tercero por detrás de la ultraderecha.
Merz ya había reconocido previamente su intención de completar el diálogo antes de Semana Santa, y salvo sorpresas, el líder de la CDU se convertirá en el próximo canciller de Alemania.
En este sentido, el dirigente opositor ha subrayado que "la situación mundial cambia drásticamente cada día", y confía en comenzar a tomar decisiones cuanto antes para enderezar el rumbo económico del país. La Oficina Federal de Estadística (Destatis) ha confirmado este martes la recesión de 2024, con una caída del PIB del 0,2 por ciento en el último trimestre.
De hecho, el democristiano ha confesado que "aún es pronto" para hablar sobre el contenido de las conversaciones, pero recuerda que para su partido hay tres temas de máxima urgencia: la política exterior y de seguridad, la migración y la economía, en situación "crítica". "Todos estos requieren decisiones rápidas e inaplazables y un Gobierno capaz de actuar", ha sentenciado. En el caso de la migración, opina que son necesarios "cambios fundamentales".
También ha confirmado que las conversaciones engloban la posibilidad de pactar un presupuesto extraordinario con el que financiar el incremento del gasto en defensa en Alemania sin incurrir técnicamente en más deuda, pero matizó que es "pronto" y que ahora mismo este propósito se plantea complicado.
Scholz ya ha aclarado que se apartará de las negociaciones para la futura coalición y que se limitará a ejercer de canciller hasta que se confirme el nombre de su sustituto. Una vez cedido el bastón de mando, se mantendrá como diputado en el Bundestag, la Cámara Baja del Parlamento alemán.
Sin mayoría de dos tercios
Toda esta urgencia estriba en que dentro de cuatro semanas, cuando se constituya el nuevo Bundestag o Cámara Baja, los conservadores y los socialdemócratas ya no tendrán ―ni siquiera contando con el probable apoyo de Los Verdes― la mayoría de dos tercios necesaria para aprobar un presupuesto extraordinario.
Por el contrario, la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) y La Izquierda, ambos opuestos a un incremento del gasto militar, sumarán 216 diputados, más de un tercio del total de 630, lo que técnicamente les permitiría vetar estos objetivos.
Desde el bloque conservador y de los socialdemócratas, varias voces se manifestaron este martes a favor de intentar aprovechar por ello ahora las cuatro semanas que quedan, aunque con cautela, en vista de que los ciudadanos podrían cuestionar la legitimidad del procedimiento.
