Reino Unido se pone en guardia por los países que miran de reojo los nuevos impuestos de España
"Podrían tener consecuencias no deseadas, afectando a los nómadas digitales, los jubilados y los compradores internacionales que contribuyen a las economías locales", advierte un experto.

La medida anunciada por el Gobierno de España de imponer un impuesto de hasta el 100% sobre el valor de las propiedades adquiridas por personas no residentes en el país desde otros puntos situados fuera de la UE ha desatado las alarmas en la comunidad internacional.
Sobre todo, después de que varias figuras hayan advertido de que otros países podrían también seguir el ejemplo. Uno de los expertos que se ha pronunciado al respecto ha sido Mike Harvey, director general de 1st Move International, quien ha defendido que la iniciativa ha "sentado un precedente importante".
Aunque según las cifras de 2024, España, Francia, Portugal y Alemania se sitúan entre los 10 principales destinos de los británicos, el aumento de los precios y las restricciones anunciadas podrían provocar que decidan refugiarse en otra zona, tal y como señaló Harvey. "Si bien estas políticas apuntan a abordar la escasez de viviendas, podrían tener consecuencias no deseadas, afectando a los nómadas digitales, los jubilados y los compradores internacionales que contribuyen a las economías locales", reivindicó.
"Un impuesto del 100% a los compradores extranjeros podrían perjudicar la competitividad y la estabilidad económica de Grecia. El país ya está haciendo frente a las presiones inmobiliarias prohibiendo nuevas licencias de alquiler a corto plazo en zonas clave de Atenas. Otros cambios podrían reducir la inversión y afectar tanto al mercado inmobiliario como a la economía local", explicó el experto.
Por último, el incremento de impuestos "podrían tensar el mercado", señaló, "desacelerando la inversión inmobiliaria y el turismo". "Sin embargo, con la introducción de nuevos impuestos inmobiliarios para los compradores extranjeros, este crecimiento podría estar en riesgo. Portugal sigue siendo un destino principal para los británicos, pero la introducción de estos impuestos podría frenar ese interés, afectando tanto al mercado inmobiliario como a la economía en general", sentenció.