Rusia apela a tácticas turbias para colar en Occidente un hidrocarburo 'raro'
China e India están comprando algo de este producto, pero ambos países tiene su propio suministro.
El petróleo, el diesel y la gasolina están escapando de las sanciones de Occidente a raíz de la guerra en Ucrania debido a las fuertes compras de países como China e India. Sin embargo, hay un producto, menos conocido, que sí está notando, y mucho, los obstáculos para hacerse un hueco en los mercados.
Rusia está ahora apelando a prácticas turbias para conseguir vender en Occidente el nafta, un producto que se usa especialmente para fabricar plásticos y producto petroquímicos. Entre ellas, el medio El Economista ha destacado que productores y vendedores han tomados medidas como que el combustible sea etiquetado como gasolina o que las cargas salgan de los puertos sin un destino claro, y ha citado personas familiarizadas con el tema de FGE y Kpler, consultadas por Bloomberg.
"No hay una salida clara y dedicada para la nafta rusa ahora que sus principales compradores, Corea del Sur y Europa, no pueden adquirirla directamente", asegura Armaan Ashraf, jefe global de líquidos de gas natural en la consultora de la industria FGE en Singapur. "Colocar nafta rusa puede ser más difícil que su crudo", ha agregado.
Falta de compradores
China e India están comprando algo de este producto, pero ambos países tiene su propio suministro. Mientras, Corea del Sur, un importante consumidor de nafta antes del conflicto, ha evitado las importaciones directas desde que estalló la guerra. Por lo tanto, esta falta de compradores capaces de absorber grandes volúmenes ha incrementado el problema al que se enfrenta Rusia.
Según FGE, se ha observado que la gasolina rusa fluye hacia los tanques de almacenamiento en los Emiratos Árabes Unidos y África Occidental, algo que, han destacado, antes era raro. Sin embargo, "esta gasolina debe ser nafta o potencialmente incluso gasolina sin especificación con una gran cantidad de nafta mezclada", asegura Ashraf.
Las sanciones fijaron un tope de 45 dólares el barril para la nafta rusa, pero los precios del mercado están actualmente por encima de ese nivel. Mientras, la gasolina tiene un límite mucho más alto de 100 dólares el barril.
