Una mujer ofrecía 6.500 euros si encontraban a su perro perdido: el can ya había tenido el final más sádico
Fue una fuga con consecuencias fatales.
Una mujer ofrecía 6.500 euros si encontraban a su perro perdido: el can ya había tenido el final más sádico
Fue una fuga con consecuencias fatales.
Una mujer ofrecía 6.500 euros si encontraban a su perro perdido: el can ya había tenido el final más sádico
Fue una fuga con consecuencias fatales.
Una mujer ofrecía 6.500 euros si encontraban a su perro perdido: el can ya había tenido el final más sádico
Fue una fuga con consecuencias fatales.
Una mujer ofrecía 6.500 euros si encontraban a su perro perdido: el can ya había tenido el final más sádico
Fue una fuga con consecuencias fatales.
La búsqueda desesperada de una mujer por su perro perdido en Shenzhen, China, ha terminado en un escándalo nacional tras descubrirse que el animal no solo había sido atropellado, sino que fue cocinado por trabajadores de una autopista. La dueña del can, de nombre Li, había ofrecido una recompensa de 6.500 euros para recuperarlo, sin saber que ya había tenido un destino impensable.
Durante las celebraciones del Año Nuevo Chino, millones de personas en China viajan para reunirse con sus familias, lo que hace que los hoteles para mascotas estén completamente llenos. Fue en uno de estos establecimientos donde Li dejó a su perro, Yi Yi, mientras ella disfrutaba de unas vacaciones en las Maldivas.
Sin embargo, lo que debía ser un refugio seguro se convirtió en una trampa mortal. El perro, asustado por los fuegos artificiales, logró escapar del recinto a pesar de que estaba vallado. Su huida terminó en una autopista de Shenzhen, donde fue atropellado y abandonado en la cuneta por el conductor que lo arrolló.
Un final horrible
Hasta ese momento, la historia no era más que un trágico accidente, pero lo peor estaba por llegar. Unos trabajadores de mantenimiento de carreteras encontraron al animal sin vida y, en lugar de reportarlo como suele ser la norma, decidieron llevarlo a su oficina y cocinarlo.
Las imágenes de las cámaras de seguridad de la autopista, reveladas por el diario chino The Paper, muestran cómo los empleados recogieron a Yi Yi, lo transportaron a las instalaciones de la empresa y lo prepararon para la cena. En total, ocho operarios participaron en la comida, cocinada por el chef del centro de trabajo.
Uno de los representantes de la empresa confirmó que los trabajadores tomaron fotos del perro y subieron la información al sistema de la compañía, cumpliendo inicialmente con el protocolo. Sin embargo, después decidieron cocinarlo, asumiendo que era un perro callejero.
Indignación y medidas legales
El caso ha desatado una fuerte polémica en China, donde el consumo de carne de perro es un tema altamente divisivo. Aunque en algunas zonas rurales sigue siendo una práctica habitual, en ciudades como Shenzhen está prohibida desde 2020, siendo una de las primeras localidades en prohibir la venta y consumo de carne de perros y gatos.
Tras enterarse del destino de Yi Yi, Li explotó en redes sociales, denunciando la crueldad del acto y asegurando que demandará a la empresa por violar las leyes de seguridad alimentaria. La compañía, por su parte, ha expresado su pesar y ha prometido sanciones severas contra los empleados involucrados.
La búsqueda desesperada de una mujer por su perro perdido en Shenzhen, China, ha terminado en un escándalo nacional tras descubrirse que el animal no solo había sido atropellado, sino que fue cocinado por trabajadores de una autopista. La dueña del can, de nombre Li, había ofrecido una recompensa de 6.500 euros para recuperarlo, sin saber que ya había tenido un destino impensable.
Durante las celebraciones del Año Nuevo Chino, millones de personas en China viajan para reunirse con sus familias, lo que hace que los hoteles para mascotas estén completamente llenos. Fue en uno de estos establecimientos donde Li dejó a su perro, Yi Yi, mientras ella disfrutaba de unas vacaciones en las Maldivas.
Sin embargo, lo que debía ser un refugio seguro se convirtió en una trampa mortal. El perro, asustado por los fuegos artificiales, logró escapar del recinto a pesar de que estaba vallado. Su huida terminó en una autopista de Shenzhen, donde fue atropellado y abandonado en la cuneta por el conductor que lo arrolló.
Un final horrible
Hasta ese momento, la historia no era más que un trágico accidente, pero lo peor estaba por llegar. Unos trabajadores de mantenimiento de carreteras encontraron al animal sin vida y, en lugar de reportarlo como suele ser la norma, decidieron llevarlo a su oficina y cocinarlo.
Las imágenes de las cámaras de seguridad de la autopista, reveladas por el diario chino The Paper, muestran cómo los empleados recogieron a Yi Yi, lo transportaron a las instalaciones de la empresa y lo prepararon para la cena. En total, ocho operarios participaron en la comida, cocinada por el chef del centro de trabajo.
Uno de los representantes de la empresa confirmó que los trabajadores tomaron fotos del perro y subieron la información al sistema de la compañía, cumpliendo inicialmente con el protocolo. Sin embargo, después decidieron cocinarlo, asumiendo que era un perro callejero.
Indignación y medidas legales
El caso ha desatado una fuerte polémica en China, donde el consumo de carne de perro es un tema altamente divisivo. Aunque en algunas zonas rurales sigue siendo una práctica habitual, en ciudades como Shenzhen está prohibida desde 2020, siendo una de las primeras localidades en prohibir la venta y consumo de carne de perros y gatos.
Tras enterarse del destino de Yi Yi, Li explotó en redes sociales, denunciando la crueldad del acto y asegurando que demandará a la empresa por violar las leyes de seguridad alimentaria. La compañía, por su parte, ha expresado su pesar y ha prometido sanciones severas contra los empleados involucrados.
La búsqueda desesperada de una mujer por su perro perdido en Shenzhen, China, ha terminado en un escándalo nacional tras descubrirse que el animal no solo había sido atropellado, sino que fue cocinado por trabajadores de una autopista. La dueña del can, de nombre Li, había ofrecido una recompensa de 6.500 euros para recuperarlo, sin saber que ya había tenido un destino impensable.
Durante las celebraciones del Año Nuevo Chino, millones de personas en China viajan para reunirse con sus familias, lo que hace que los hoteles para mascotas estén completamente llenos. Fue en uno de estos establecimientos donde Li dejó a su perro, Yi Yi, mientras ella disfrutaba de unas vacaciones en las Maldivas.
Sin embargo, lo que debía ser un refugio seguro se convirtió en una trampa mortal. El perro, asustado por los fuegos artificiales, logró escapar del recinto a pesar de que estaba vallado. Su huida terminó en una autopista de Shenzhen, donde fue atropellado y abandonado en la cuneta por el conductor que lo arrolló.
Un final horrible
Hasta ese momento, la historia no era más que un trágico accidente, pero lo peor estaba por llegar. Unos trabajadores de mantenimiento de carreteras encontraron al animal sin vida y, en lugar de reportarlo como suele ser la norma, decidieron llevarlo a su oficina y cocinarlo.
Las imágenes de las cámaras de seguridad de la autopista, reveladas por el diario chino The Paper, muestran cómo los empleados recogieron a Yi Yi, lo transportaron a las instalaciones de la empresa y lo prepararon para la cena. En total, ocho operarios participaron en la comida, cocinada por el chef del centro de trabajo.
Uno de los representantes de la empresa confirmó que los trabajadores tomaron fotos del perro y subieron la información al sistema de la compañía, cumpliendo inicialmente con el protocolo. Sin embargo, después decidieron cocinarlo, asumiendo que era un perro callejero.
Indignación y medidas legales
El caso ha desatado una fuerte polémica en China, donde el consumo de carne de perro es un tema altamente divisivo. Aunque en algunas zonas rurales sigue siendo una práctica habitual, en ciudades como Shenzhen está prohibida desde 2020, siendo una de las primeras localidades en prohibir la venta y consumo de carne de perros y gatos.
Tras enterarse del destino de Yi Yi, Li explotó en redes sociales, denunciando la crueldad del acto y asegurando que demandará a la empresa por violar las leyes de seguridad alimentaria. La compañía, por su parte, ha expresado su pesar y ha prometido sanciones severas contra los empleados involucrados.
La búsqueda desesperada de una mujer por su perro perdido en Shenzhen, China, ha terminado en un escándalo nacional tras descubrirse que el animal no solo había sido atropellado, sino que fue cocinado por trabajadores de una autopista. La dueña del can, de nombre Li, había ofrecido una recompensa de 6.500 euros para recuperarlo, sin saber que ya había tenido un destino impensable.
Durante las celebraciones del Año Nuevo Chino, millones de personas en China viajan para reunirse con sus familias, lo que hace que los hoteles para mascotas estén completamente llenos. Fue en uno de estos establecimientos donde Li dejó a su perro, Yi Yi, mientras ella disfrutaba de unas vacaciones en las Maldivas.
Sin embargo, lo que debía ser un refugio seguro se convirtió en una trampa mortal. El perro, asustado por los fuegos artificiales, logró escapar del recinto a pesar de que estaba vallado. Su huida terminó en una autopista de Shenzhen, donde fue atropellado y abandonado en la cuneta por el conductor que lo arrolló.
Un final horrible
Hasta ese momento, la historia no era más que un trágico accidente, pero lo peor estaba por llegar. Unos trabajadores de mantenimiento de carreteras encontraron al animal sin vida y, en lugar de reportarlo como suele ser la norma, decidieron llevarlo a su oficina y cocinarlo.
Las imágenes de las cámaras de seguridad de la autopista, reveladas por el diario chino The Paper, muestran cómo los empleados recogieron a Yi Yi, lo transportaron a las instalaciones de la empresa y lo prepararon para la cena. En total, ocho operarios participaron en la comida, cocinada por el chef del centro de trabajo.
Uno de los representantes de la empresa confirmó que los trabajadores tomaron fotos del perro y subieron la información al sistema de la compañía, cumpliendo inicialmente con el protocolo. Sin embargo, después decidieron cocinarlo, asumiendo que era un perro callejero.
Indignación y medidas legales
El caso ha desatado una fuerte polémica en China, donde el consumo de carne de perro es un tema altamente divisivo. Aunque en algunas zonas rurales sigue siendo una práctica habitual, en ciudades como Shenzhen está prohibida desde 2020, siendo una de las primeras localidades en prohibir la venta y consumo de carne de perros y gatos.
Tras enterarse del destino de Yi Yi, Li explotó en redes sociales, denunciando la crueldad del acto y asegurando que demandará a la empresa por violar las leyes de seguridad alimentaria. La compañía, por su parte, ha expresado su pesar y ha prometido sanciones severas contra los empleados involucrados.
La búsqueda desesperada de una mujer por su perro perdido en Shenzhen, China, ha terminado en un escándalo nacional tras descubrirse que el animal no solo había sido atropellado, sino que fue cocinado por trabajadores de una autopista. La dueña del can, de nombre Li, había ofrecido una recompensa de 6.500 euros para recuperarlo, sin saber que ya había tenido un destino impensable.
Durante las celebraciones del Año Nuevo Chino, millones de personas en China viajan para reunirse con sus familias, lo que hace que los hoteles para mascotas estén completamente llenos. Fue en uno de estos establecimientos donde Li dejó a su perro, Yi Yi, mientras ella disfrutaba de unas vacaciones en las Maldivas.
Sin embargo, lo que debía ser un refugio seguro se convirtió en una trampa mortal. El perro, asustado por los fuegos artificiales, logró escapar del recinto a pesar de que estaba vallado. Su huida terminó en una autopista de Shenzhen, donde fue atropellado y abandonado en la cuneta por el conductor que lo arrolló.
Un final horrible
Hasta ese momento, la historia no era más que un trágico accidente, pero lo peor estaba por llegar. Unos trabajadores de mantenimiento de carreteras encontraron al animal sin vida y, en lugar de reportarlo como suele ser la norma, decidieron llevarlo a su oficina y cocinarlo.
Las imágenes de las cámaras de seguridad de la autopista, reveladas por el diario chino The Paper, muestran cómo los empleados recogieron a Yi Yi, lo transportaron a las instalaciones de la empresa y lo prepararon para la cena. En total, ocho operarios participaron en la comida, cocinada por el chef del centro de trabajo.
Uno de los representantes de la empresa confirmó que los trabajadores tomaron fotos del perro y subieron la información al sistema de la compañía, cumpliendo inicialmente con el protocolo. Sin embargo, después decidieron cocinarlo, asumiendo que era un perro callejero.
Indignación y medidas legales
El caso ha desatado una fuerte polémica en China, donde el consumo de carne de perro es un tema altamente divisivo. Aunque en algunas zonas rurales sigue siendo una práctica habitual, en ciudades como Shenzhen está prohibida desde 2020, siendo una de las primeras localidades en prohibir la venta y consumo de carne de perros y gatos.
Tras enterarse del destino de Yi Yi, Li explotó en redes sociales, denunciando la crueldad del acto y asegurando que demandará a la empresa por violar las leyes de seguridad alimentaria. La compañía, por su parte, ha expresado su pesar y ha prometido sanciones severas contra los empleados involucrados.