El motivo por el que los mosquitos te eligen para picarte

El motivo por el que los mosquitos te eligen para picarte

Llega la época en la que los mosquitos te ceban a picaduras. Pero, ¿por qué les atraes tanto? La ciencia te lo explica.

MosquitoGetty Images

Llega el buen tiempo, y, con él, la época de mayor actividad de los mosquitos. Con el aumento de las temperaturas, la presencia de estos insectos se intensifica, convirtiéndose en compañeros molestos durante las noches más cálidas, desencadenando una batalla contra este diminuto invasor en nuestras habitaciones.

Sin embargo, compartir el espacio con otras personas puede disminuir las probabilidades de sufrir las picaduras de estos insectos. Aunque existen más de 3.500 especies de mosquitos, solo alrededor de 200 se alimentan de sangre humana. No obstante, diversos estudios científicos han identificado ciertas características que influyen en la frecuencia con la que somos picados por los mosquitos.

Estos insectos son atraídos principalmente por el dióxido de carbono y el ácido láctico. Por lo tanto, tienden a picar más a los adultos, que emiten más dióxido de carbono al respirar que los niños, así como a las mujeres embarazadas y a las personas más altas, ya que estas últimas liberan más ácido láctico, según un estudio publicado en Nature.

Además, el olor corporal juega un papel relevante. Investigaciones realizadas por la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres han señalado que las moléculas que componen nuestro olor corporal pueden influir en la atracción de los mosquitos, actuando como un tipo de "repelente natural" que los aleja.

Un estudio del año 2004, publicado en el 'Journal of Medical Entomology', reveló que las personas con sangre tipo O son picadas el doble que las personas con sangre tipo A, mientras que aquellas con sangre tipo B estarían en una posición intermedia.

Otros estudios han demostrado que los colores negro y rojo atraen a los mosquitos, mientras que el amarillo o el verde los alejan. Por último, es bien sabido que los mosquitos son atraídos por las altas temperaturas y, gracias a su olfato, identifican las áreas más propicias para picarnos, generalmente los pies y los tobillos.