Un estudio de la Universidad de Harvard identifica un desequilibrio químico en el cerebro vinculado al deterioro cognitivo y plantea una posible vía de tratamiento.
"Este hallazgo aporta nueva luz al hecho de que muchas de las terapias que funcionan con éxito en los modelos preclínicos luego no lo hacen en humanos", ha señalado el investigador de la Universidad de Málaga, David Baglietto.