
Por qué nos hicimos amigos de un hombre de 90 años
Hace unos días volví de pasar 10 días de vacaciones en Creta. Unas vacaciones que me cambiaron la vida. No por el sol, los cócteles o las preciosas puestas de sol. Ni siquiera por la cantidad de gatos a los que pude dar de comer a lo largo el viaje. Me cambiaron la vida porque conocí a Ken.