Londres sigue queriendo modificar los protocolos, con Irlanda del Norte y Gibraltar como puntos sin aclarar. El año empieza negociando con un tono algo menos tenso.
El colapso en el transporte, el Brexit y el fin de las restricciones anticovid forman una tormenta perfecta que lleva a roturas puntuales del stock en ginebra, whisky o vodka.
El 'premier' dice que él sí tendrá las "agallas" que les han faltado a anteriores Gobiernos para resolver los problemas "de largo plazo" que lastran a Reino Unido.
Se concentrarán en las áreas más afectadas de Londres y el sur de Inglaterra, dentro de la llamada Operación Escalin, planeada por si el Brexit tenía estas consecuencias.
España y el Reino Unido lograron un principio de acuerdo sobre el Peñón, pero está pendiente del tratado que puedan alcanzar la Comisión Europea y Londres.
La ausencia de conductores por los draconianos visados impuestos tras el Brexit, el covid y las malas condiciones del sector complican la distribución en las islas.
Transportarán combustible “donde más se necesite y para dar mayores garantías de que el suministro de combustible sigue siendo robusto", dice el Gobierno.