El protocolo que evita la aparición de una frontera física en Irlanda tras el divorcio de la UE sigue incomodando y complica las negociaciones con Bruselas.
El norirlandés Partido Democrático Unionista (DUP) bloquea así la administración, que debe estar comandada de forma compartida como fijan los acuerdos de paz.
Londres sigue queriendo modificar los protocolos, con Irlanda del Norte y Gibraltar como puntos sin aclarar. El año empieza negociando con un tono algo menos tenso.
El colapso en el transporte, el Brexit y el fin de las restricciones anticovid forman una tormenta perfecta que lleva a roturas puntuales del stock en ginebra, whisky o vodka.
El 'premier' dice que él sí tendrá las "agallas" que les han faltado a anteriores Gobiernos para resolver los problemas "de largo plazo" que lastran a Reino Unido.
Se concentrarán en las áreas más afectadas de Londres y el sur de Inglaterra, dentro de la llamada Operación Escalin, planeada por si el Brexit tenía estas consecuencias.