Entre los problemas que trajo consigo la crisis económica mundial, está la dificultad para conseguir un crédito bancario. Por ello han surgido nuevas fórmulas para acceder a la financiación, como los créditos que algunas nuevas entidades conceden a trabajadores autónomos y pymes, con mayor facilidad que el sector financiero tradicional.
Ahora hace falta que el incremento en la oferta de crédito confluya con una demanda de crédito acompañada por un crecimiento sostenido en la economía española que permita a los deudores ser solventes y a las entidades prever que los impagos producidos en los últimos años no volverán a repetirse. No basta con aprobar hoy: habrá que aprobar también en el futuro.
François Hollande llegó a la presidencia de la República francesa con el crédito agotado. Aquellos que financian los préstamos nacionales, junto con todo el conglomerado industrial y mediático que los rodea, habían decidido ya que los socialistas no podrían permitirse cumplir con su programa
Los legendarios 12 trabajos de Hércules palidecieron en la pasada tarde del 18 de febrero, en la sesión de control del Senado de España. Allí mismo, en sede parlamentaria, el presidente Rajoy afirmó que "hemos solucionado el problema del déficit tarifario". Así, sin más, de un día para otro.
La euforia no parece ser un estado compartido por todos. En el seno de las pequeñas y medianas empresas la crisis continua y en fase bastante aguda. Según los últimos datos del INE la disolución de empresas aumentó un 12% en noviembre de 2013, frente al mismo período del año anterior.