Comienza la cuenta atrás para el desenlace del 'caso Juana Rivas': defensa e hijos apuran el último día
La entrega del menor esta prevista para este viernes, motivo por el cual tanto sus hermanos, como su madre, como la defensa de esta han protestado, pidiendo ayuda tanto a la justicia como a diversas organizaciones a través de varios escritos.

El Caso Juana Rivas continúa. A apenas 24 horas de la entrega del menor, prevista para este martes, pero aplazada a este viernes, la defensa de la madre, así como su hijo menor y su hijo mayor, como también varios políticos y figuras públicas, no cesan su lucha e intentan que el niño se quede en España.
El primero en pronunciarse ha sido el hijo menor de Juana Rivas, el cual ha enviado cartas manuscritas y firmadas por él mismo pidiendo auxilio al Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas, Amnistía Internacional y Save the Children. En las misivas, a las que ha tenido acceso Europa Press, el menor suplica ayuda para quedarse en España y denuncia presuntos malos tratos por parte de su progenitor. Están dirigidas al miembro del Comité de los Derechos del Niño, Philip D. Jaffé; al director de Amnistía Internacional en España, Esteban Beltrán; y a la directora general de Save the Children España, Isla Ramos.
Daniel afirma por escrito que su padre le "pega" y lo "trata muy mal", y que teme por su seguridad si es devuelto a Italia: "Llevo toda mi vida asustado por culpa de mi padre, que siempre me ha maltratado. Un día me tiró por las escaleras y me hizo mucho daño en las costillas, que las tengo deformadas". "Nadie me escucha, ya tengo once años y sé lo que quiero para mi vida", reclama.
"Ayer lo pasé muy mal, durante horas pedí gritando ayuda y le decía a las psicólogas que no me podía ir a Italia", señala el menor, haciendo referencia a lo sucedido este martes en el punto de encuentro familiar de Granada. "Me va a matar como vuelva", exclamó a las puertas del centro el pequeño.
Allí pasó alrededor de dos horas y media junto a su hermano mayor, residente en España, mientras esperaba al padre, que tenía previsto llevarlo consigo en cumplimiento de una resolución judicial italiana.
La entrega no se materializó finalmente después de que la madre, Juana Rivas, sufriera una crisis de ansiedad tras dejar al niño en el centro, lo que obligó a su traslado en ambulancia. El padre, al ver que no se completaba la entrega, se marchó sin el menor.
A la salida del punto de encuentro, Paqui Granados, asesora de Juana Rivas en el Centro de Información a la Mujer de Macarena, denunció la situación del niño: "Se le está exigiendo a un menor de 11 años que ha denunciado amenazas de muerte por parte de su padre un grado de resistencia que no se pediría ni al adulto más fuerte en cualquier rincón de Europa".

El hijo mayor pide "salvar" a su hermano
El hijo mayor de Juana Rivas, de 19 años, también ha pedido por carta a "cualquier autoridad competente de España" este jueves que eviten la entrega de su hermano menor, de 11 años, al padre, el italiano Francesco Arcuri, que tiene la custodia, como está dictaminado judicialmente para este viernes en cumplimiento de una resolución de los juzgados de Italia.
El joven se retotrae en la misiva, a la que ha tenido acceso Europa Press, al verano de 2017 cuando a finales de agosto fue entregado a Arcuri con su hermano después de que Rivas pasara un mes en paradero desconocido con los menores pese a tener que ponerlos a disposición del padre para su traslado a Italia, unos hechos por los que la madre de Maracena (Granada) fue condenada inicialmente a cinco años de prisión.
La pena fue reducida a dos años y seis meses de prisión por el Tribunal Supremo al considerar que, aunque fueron dos los niños sustraídos, cometió un único delito de sustracción de menores y no dos. Posteriormente, un indulto del Gobierno rebajó la pena de prisión a un año y tres meses y conmutó la pena de inhabilitación especial para el ejercicio de la patria potestad por una pena de 180 días de trabajos en beneficio de la comunidad.
En su carta de este jueves, el hijo mayor, ahora residente en España, señala que entonces no se "defendieron" sus derechos, ni lo "escucharon" y le "entregaron" al padre dando lugar a lo que ha definido en la misiva como "cinco años de abuso y de maltrato" hasta sus 16 años.
Posteriormente, "la única verdad" es que desde que cumplió 18 años lucha en los tribunales para "salvar" a su hermano menor, en tanto, añade, a su padre "lo juzgarán en Italia en menos de dos meses por malos tratos continuados hacia" ellos "durante años".
"Confío en que lo condenen porque la Fiscalía aporta muchas pruebas irrefutables, necesitamos justicia", señala en referencia al proceso italiano, para el que hay fijada una vista el 18 de septiembre, y, centrándose en la entrega prevista para este viernes, en virtud de lo dispuesto por el Juzgado de Primera Instancia número 3 de Granada para ejecutar la resolución italiana que mantiene la custodia para Arcuri, pide para su hermano que "no permitan que lo seden y entreguen" como apunta que ocurrió con él "hace ocho años".

Irene Montero avisa sobre el hijo menor de Juana Rivas: "El Estado es responsable de lo que le pase a Daniel"
Por su parte, la secretaria política de Podemos y eurodiputada, Irene Montero, ha afirmado que el Gobierno debe garantizar el interés superior del menor y evitar que el hijo de Juana Rivas vuelva a Italia con el padre, Francesco Arcuri, aplicando excepción del Convenio de la Haya. "El Estado es responsable de lo que le pase a Daniel", ha advertido.
En una entrevista en RNE, recogida por Europa Press, la exministra de Igualdad ha defendido que el niño tiene que ser escuchado por el Estado y por el sistema de justicia. "Solo lo ha hecho en una ocasión, y cuando se le ha escuchado, fue el juzgado de Guardia 4 de Granada que, tras escucharle, suspendió la entrega al padre", ha señalado.
Montero ha destacado que "Daniel es un niño de 11 años que es el principal testigo en un juicio que tiene su padre en septiembre, acusado de malos tratos". "El padre de Daniel está acusado de malos tratos a Daniel y a su hermano en Italia, y el niño es el principal testigo. Entonces, si Daniel vuelve a Italia con su padre es evidente que corre un grave riesgo", ha alertado.
"Es muy difícil de entender que la justicia de nuestro país haga que este niño vaya a convivir con el padre contra el que tiene que declarar en unos meses y que llegue en septiembre al juzgado de la mano del hombre contra el que va a declarar en ese juicio", ha manifestado.
La exministra ha añadido que "todos los tratados internacionales, desde la Convención de Derechos del Niño, pasando por la excepción del Convenio de la Haya, los reglamentos europeos, la Ley de lucha contra la violencia contra la infancia, dicen que lo primero es el interés superior del menor".
"El Estado es el responsable de la vida y del bienestar de Daniel y de garantizar sus derechos y, por tanto, no se debe producir esa entrega si supone un riesgo para su vida o para su salud, o para su salud física o para su salud psíquica", ha insistido, para después añadir que "el propio niño está diciendo con claridad que tiene miedo, que su padre le ha amenazado de muerte, que le pega, que le maltrata, y eso es suficiente indicio como para que no se produzca esa entrega".
De este modo, Irene Montero ha subrayado que "si el Estado y el Gobierno y el sistema de justicia permiten que Daniel se vaya con su padre y le exponen a ese riesgo, el Estado va a ser responsable de lo que le pase hasta el punto de que ya ha sido condenado en una ocasión por Naciones Unidas y ha asumido en dos ocasiones su responsabilidad en el asesinato de tres niñas, las hijas de Itziar Prats y de Ángela González Carreño, que les pasó algo muy parecido".
