Sánchez se harta del "sólo sí es sí": "Lo importante es que acabe ya”

Sánchez se harta del "sólo sí es sí": "Lo importante es que acabe ya”

El líder socialista aspira a dar carpetazo de una vez a la crisis provocada por la polémica norma aunque haya tenido que pactar con el PP.

Pedro Sánchez e Irene Montero, en mayo de 2022Europa Press via Getty Images

“Pido perdón a las víctimas por los efectos indeseados de la ley del solo sí es sí”. Pedro Sánchez pretende dar carpetazo en los próximos días a una de las cuestiones que más daño político le ha hecho en esta legislatura. Más incluso que la reforma de la sedición o la malversación, según fuentes de su propio equipo. Tras disculparse en una entrevista el domingo en los rotativos de Vocento, aspira a sacar adelante en el Congreso la modificación de la norma, aunque para ello haya tenido que pactar con el PP.

El objetivo del presidente, como con otras cuestiones peliagudas que han marcado su mandato, es que los españoles acaben olvidándose de esos “efectos indeseados” de la ley del solo sí es sí y se centren en su gestión económica y social a la hora de meter la papeleta en la urna. Sin ir más lejos, este mismo martes, el Consejo de Ministros aprueba 50.000 viviendas de la Sareb -el banco malo- para alquiler a “precio asequible”.

“Hoy España crece y crea empleo como nunca. No se trata de milagros ni curanderos ni telepredicadoras. Es que nosotros gestionamos mejor que la derecha de este país. Nosotros sí ponemos la economía al servicio de la mayoría y no solo de unos pocos”, se reivindicó el propio Sánchez el domingo, en la clausura de un acto con candidatos municipales. Según Moncloa, si el debate se centra en la economía, el PSOE no saldrá mal parado en las autonómicas y municipales de finales de mayo. “El PP ha perdido la bandera de la economía”, aseguran.

Y es por ello que en Moncloa ansían el momento de reformar la ley de libertad sexual, que ha provocado la mayor crisis con su socio de coalición y una inquietud y malestar enorme entre barones y cargos que en pocas se semanas se enfrentan a las elecciones. “Creo que ningún diputado, incluso los que han votado en contra de esta ley, está a favor de rebajar las penas. Por tanto, pido perdón a las víctimas y vamos a poner solución a estos efectos indeseados porque es la mejor manera de defender la propia ley”, afirmó Sánchez en la citada entrevista.

No está siendo fácil. PSOE y Unidas Podemos no lograron evitar el choque y, de hecho, mantienen sus discrepancias, hasta el punto de que Sánchez dio orden de buscar el consenso con el PP pese a que hace meses que no tiene ninguna interlocución con Alberto Núñez Feijóo. La directriz era “arreglarlo, aunque fuera con el PP”, según las fuentes consultadas, toda vez otros socios parlamentarios habituales también mostraron sus discrepancias con la reforma planteada por los socialistas.

Los populares se mostraron desde el primer momento proclives a pactar con el Ejecutivo y votar que sí siempre y cuando se atendieran sus reclamaciones. Eso sí, en Génova están convencidos de que esta cuestión sigue provocando un gran desgaste en el Gobierno, y de ahí que seguirán utilizándolo como arma política. “Son ya casi 1.000 los agresores sexuales beneficiados por la ley. Llevamos meses exigiendo al Gobierno disculpa, que asuma responsabilidades y que corrija la ley”, resumieron en Génova. Para Feijóo no basta con el perdón de Sánchez y lo que urgen son dimisiones.

En el PSOE quisieron rebajar la importancia del acuerdo con el PP para evitar que el enfado de Unidas Podemos y el resto de sus socios parlamentarios fuera a más. “El PP ha humillado al PSOE haciéndole reforzar aún más esa vuelta al modelo penal anterior que basa la credibilidad de la víctima en función de las heridas que la violencia del agresor ejerce sobre la víctima”, se apresuró a denunciar Irene Montero. Andrea Fernández, la secretaria de Igualdad de los socialistas, contestó que las modificaciones planteadas por el PP no suponen “cambios sustanciales”.

“Lo importante es que esto acabe ya y se le ponga solución, que acabe esta pesadilla. O, al menos, que los españoles interpreten que hemos hecho lo que teníamos que hacer para tratar de solucionar el problema pese a que lleguemos tarde. Es un tema que nos ha hecho mucho daño. El contador de los agresores sexuales beneficiados por la ley ha sido terrible para nosotros”, en palabras de un líder autonómico socialista, en conversación informal con este diario. Precisamente la mayoría de barones reclamó a Sánchez la reforma de la ley.