Objetivo: no comerse el turrón en una mesa electoral. Los plazos de la investidura para evitar elecciones en Navidad

La maquinaria para fijar la fecha de investidura de la recién inaugurada XV Legislatura ya se ha puesto en marcha. Una vez se han constituido las Cortes y el rey ha agendado su ronda de contactos con los líderes de los diferentes partidos con representación en el Congreso, la gran duda ahora es saber cuándo se celebrará ese primer hipotético debate de investidura y quién será el candidato. 

La segunda cuestión la resolverá el rey ya que, de acuerdo al artículo 99 de la Constitución Española, es el monarca quien "propondrá un candidato a la presidencia del gobierno". Dicha elección podría producirse este mismo próximo martes por la tarde, una vez haya concluido su ronda de entrevistas con el líder de la fuerza más votada, el popular Alberto Núñez Feijóo.

A partir de entonces, la elección de fecha de la investidura queda en manos de la presidenta del Congreso, Francina Armengol. Ni la Constitución ni el reglamento de la cámara establece un período mínimo o uno máximo para la celebración del debate, sino que se fija en función de la actividad parlamentaria y también del propio interés del candidato propuesto. 

Dos meses a contrarreloj... y 47 días más para las urnas

Armengol tendrá que tener muy en cuenta la fecha elegida para dicho debate de investidura ante el fehaciente riesgo de un bloqueo político que llevaría a España de nuevo a elecciones. La Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG) estipula que tras la primera votación de investidura se inicia un plazo de dos meses para convocar nuevos comicios si ningún candidato consigue ser investido como presidente.

Pasado esos dos meses, si no se ha formado gobierno, las cámaras quedan disueltas y al día siguiente se publica el real decreto de convocatoria de elecciones, que deberán celebrarse en un plazo exacto de 47 días.

Según la fecha elegida por Armengol, la repetición electoral podría caer en plenas fiestas navideñas. Un riesgo que se quiere evitar a toda costa y que limita mucho las opciones de la presidenta del Congreso de cara a fijar esa primera investidura.

Si se quisiera que las elecciones se celebraran el domingo 17 de diciembre, justo antes de la Navidad, la disolución de las Cortes y convocatoria de elecciones deberían publicarse en el BOE el 31 de octubre. Por tanto, la primera votación de investidura debería tener lugar el miércoles 30 de agosto. Una fecha algo precipitada puesto que la Mesa del Congreso se reunirá el lunes 28 para fijar los grupos parlamentarios y tomar otras decisiones importantes para poder convocar la primera sesión plenaria como es el reparto de escaños en el hemiciclo.

Si se deja pasar la oportunidad del 30 de agosto, el calendario ya obligaría a celebrar la investidura en la segunda quincena de septiembre. Para que los nuevos comicios fueran el 7 de enero (fecha complicada al ser el día después de la festividad de Reyes y regreso de muchos españoles tras sus vacaciones navideñas), la primera votación de investidura tendría que ser el 20 de septiembre. Y si se prefiere que fuera el 14 de enero, el debate debería tener lugar el 27.

Por tanto, sería un gran riesgo que Armengol fijara el debate de investidura entre el 31 de agosto y el 20 de septiembre, salvo que se dé por seguro el éxito de la misma o se optara por celebrar las elecciones en diciembre en otra fecha que no fuera en domingo. Algo que sólo ocurrió en los dos primeros comicios generales (1979 y 1982), que fueron en jueves. 

De la constitución del Congreso... a la investidura

La horquilla de días transcurridos en cada legislatura entre la constitución del Congreso y el fin de la primera sesión de investidura es muy amplia. En la primera y décima legislatura, la diferencia fue de sólo siete días, mientras que en la XIII hubo que esperar hasta 63. En aquel entonces, el Congreso fue constituido el 21 de mayo de 2019 y Sánchez no se sometió a su primera votación de investidura hasta el 23 de julio. El candidato socialista no recibió la confianza de la cámara y, dos meses después, se convocaron de nuevo elecciones.

En la pasada legislatura, las Cortes se constituyeron el 3 de diciembre y la primera votación de investidura fue el 5 de enero. En total, 33 días. En esa ocasión, Sánchez sí fue elegido presidente del gobierno tras sumar mayoría simple en la segunda votación con 167 votos a favor y 165 en contra.