Aparca su coche en un parking privado para irse de vacaciones y la sorpresa que se lleva al regresar le dejó sin aliento
Robert y su pareja no olvidarán la vuelta de sus vacaciones a Guadalupe.
Sin duda, Robert y su pareja recordarán durante mucho tiempo sus vacaciones en Guadalupe. Y, sobre todo, su regreso a Francia. Tal y como nos cuentan nuestros compañeros de Ladepeche.fr, los dos contrataron poder aparcar su todoterreno cerca del aeropuerto de Orly (París), desde donde debían tomar el avión. Cuando regresaron, el hombre se dio cuenta de que el vehículo tenía varios cientos de kilómetros más en el cuentakilómetros.
Pero, ¿qué ocurrió? La pareja quería encontrar una solución alternativa para aparcar su vehículo durante sus dos semanas de vacaciones. Una plataforma online les permitió encontrar una plaza en el parking Orly Navette, en Athis-Mons (Essonne). El coste: 84 euros por dos semanas, precio inmejorable... Sobre todo porque el sitio estaba vigilado por cámaras y, según la pareja, estaba muy bien valorado en la plataforma online.
Cuando Robert dejó el coche, asegura que tuvo “un presentimiento”. El interesado decidió – “por si acaso” – hacer una foto del contador de su vehículo y, tal y como le pidieron, dejar las llaves del coche a los empleados del lugar.
A su regreso a Francia, Robert estaba desilusionado: su vehículo ya no estaba aparcado donde lo había dejado y “tenía 750 km más en el cuentakilómetros”. El hombre preguntó entonces al empleado al que había confiado sus llaves: “Me dijo que no estaba al tanto”. La pareja acabó en comisaria poniendo una denuncia. Allí descubrió que varias decenas de clientes pasaron por una experiencia similar.