El cangrejo autóctono de la península resiste al hongo mortal americano

El cangrejo autóctono de la península resiste al hongo mortal americano 

Desde la década de los 70 su población se ha visto drásticamente reducida debido, principalmente, a la introducción de variedades exóticas.

Un gran cangrejo de río y la superficie del agua en el río Duratón, España.Getty Images

El cangrejos de río autóctono de la Península Ibérica resiste pese a fenómenos como el cambio climático y la llegada al ecosistema de especies invasoras. En 2022 la Comunidad de Madrid anunció la existencia de una colonia de esta especie, que hasta entonces se consideraba extinto en la región, y ahí siguen desde entonces. 

Los ejemplares detectados se corresponden con la combinación de cromosomas H1, característicos de la zona central de España y Portugal. El Austropotamobius pallipes es el único ejemplar de este crustáceo originario del territorio nacional. Tiene un caparazón de coloración marrón oliváceo, con la parte inferior pálida y el cuerpo subcilíndrico, comprimido lateralmente se divide en tres partes: la anterior (pereion) formada por la unión de cabeza y tórax, una mediana (pleon) y la cola o telson. Pero esta no es la única región española donde resiste este ejemplar. 

Desde la década de los 70 su población se ha visto drásticamente reducida debido, principalmente, a la introducción de variedades exóticas, como el cangrejo americano, portadoras de un hongo que resulta mortal para ellas.

Los expertos de la dirección general de Biodiversidad y Recursos Naturales señalaron entonces que esta variedad, encontrada en la zona sur de la región de Madrid, ha sobrevivido gracias a que el ambiente que ocupa está totalmente aislado de los ríos principales y secundarios del territorio, ya que en la mayoría de ellos viven grupos invasores que los ponen en peligro.

En España se registran oficialmente unas 350 poblaciones, en tres regiones diferenciadas: Alpina (Aragón, Cataluña y Navarra), Atlántica (Galicia, Asturias, Cantabria, Castilla y León, Navarra y País Vasco) y Mediterránea (Andalucía, Aragón, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Comunidad Valenciana, Galicia, La Rioja y Navarra). 

El Gobierno regional, a través de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura, trabaja para extraer algunas especies exóticas invasoras que se introducen en el medio natural y suponen un enorme peligro para la conservación de la flora y fauna autóctona. Así se hace con las que pueden producir importantes desequilibrios en el ecosistema, como el visón americano, el mapache o la planta de Ludwigia, que invade los ríos.