La dura realidad de una mujer de 74 años con 85.000 euros que aun así sigue trabajando
"No tengo casa propia".
El coste de vida en la ciudad australiana de Sídney ha experimentado un brutal aumento en los últimos años, poniendo a muchos de sus ciudadanos en situaciones muy delicadas. En este escenario, una mujer de 74 años ha compartido su complicada experiencia laboral, en la que se pueden ver reflejadas millones de personas.
Interceptada por la aplicación inmobiliaria Coposit, que se ha hecho popular por preguntar a transeúntes cuánto tienen ahorrado, la mujer ha revelado que, a pesar de tener cerca de 100.000 dólares en su cuenta, aún no ha logrado comprar una vivienda. "No tengo casa propia. Sigo trabajando. Es solo dinero que he ahorrado", señala.
Empleada en el sistema de salud de Nueva Gales del Sur, admite que continuar trabajando a su edad no es lo ideal. "La verdad es que no me encanta. A veces sí. Me gusta estar activa, me gusta trabajar, me gusta salir, y eso es bueno", señala, para confesar después que su "trabajo soñado" es "estar jubilada".
La mujer también denuncia el elevado coste de vida en Sídney, calificando los precios de los alquileres como "espantosos" y señalando que el aumento en los precios de los alimentos la ha llevado a cocinar más en casa para ahorrar.
Tendencia nacional
Australia no establece una edad obligatoria de jubilación, pero los ciudadanos deben esperar hasta los 67 años para acceder a la pensión de vejez. Un estudio de KPMG, recogido por Yahoo! Finance, estima que la edad promedio de jubilación es de 66,2 años para los hombres y 64,8 para las mujeres, las cifras más altas desde los años 70.
La presión económica está llevando a muchos a retrasar su retiro. Otra encuesta de Finder reveló que uno de cada seis australianos ha pospuesto su jubilación o ha vuelto al mercado laboral en los últimos dos años. Casi la mitad lo atribuye al aumento del coste de vida.
Además, una investigación de UniSuper indica que cuatro de cada cinco australianos planean seguir trabajando durante su jubilación, ya sea mediante empleo flexible, voluntariado o nuevos proyectos. La jubilación, para muchos, ha dejado de ser una etapa dorada y se ha convertido en un lujo difícil de alcanzar.