Por favor, habilita JavaScript para ver los comentarios de Disqus.
Martín Dávila, jubilado, no se corta al hablar de su situación: "Mi pensión es de 1.300€ y pago 1.000€ de hipoteca"

Martín Dávila, jubilado, no se corta al hablar de su situación: "Mi pensión es de 1.300€ y pago 1.000€ de hipoteca"

Tras jubilarse tan solo durante tres meses, se vio obligado a reengancharse durante cinco años para poder seguir pagando su vivienda.

Imagen de archivo de una persona mayor viendo algo por la ventana.
Imagen de archivo de una persona mayor viendo algo por la ventana.Getty Images

Martín Dávila no se esconde. A sus 67 años, recién jubilado, ha decidido alzar la voz para denunciar una realidad que comparten miles de pensionistas en España: la imposibilidad de llegar a fin de mes. "Cobro 1.300 euros de pensión y pago 1.000 de hipoteca. ¿Cómo se supone que debo vivir?", se pregunta con la crudeza de quien ha trabajado toda su vida y ahora se enfrenta a una vejez marcada por la incertidumbre económica.

Su historia, recogida por El Español, pone rostro a una problemática que va más allá de las cifras. Dávila fue director comercial en Ferrero Rocher y más tarde trabajó en el montaje de mamparas de oficina. Tras jubilarse hace apenas tres meses, se vio obligado a reengancharse durante cinco años para poder seguir pagando su vivienda. "Tuve que vender otra casa para cubrir la hipoteca. Y encima me okuparon la que tenía, así que no me quedó otra que deshacerme de ella", relata.

La opción de mudarse al extranjero, como hacen otros jubilados que buscan una vida más asequible, no entra en sus planes. "No me iría a Tailandia por los nietos. Valen mucho más de lo que se ahorra. No los cambio por nada”, afirma con rotundidad.

La situación de Martín se enmarca en un contexto donde las pensiones contributivas apenas han subido un 2,8% este año, mientras que la pensión media se sitúa en 1.508 euros mensuales. Sin embargo, para muchos como él, esa cifra no representa una mejora real. La carga hipotecaria, el coste de vida y la falta de alternativas convierten la jubilación en una etapa de lucha constante.