Muchos lavan las toallas a 30 o 40 grados en la lavadora por comodidad o ahorro y resulta que es un gran error
Utilizar estos programas de lavado no garantiza la eliminación completa de estos microorganismos.

Aunque muchas personas optan por programas de lavado automáticos por comodidad o ahorro, hacerlo sin conocer las necesidades específicas de cada tejido puede comprometer la higiene de prendas como las toallas. Según expertos en lavandería, lavar las toallas a temperaturas inferiores a los 60 grados es un error común que puede tener consecuencias graves para tu salud.
Las toallas, debido a su constante exposición a la humedad, son un caldo de cultivo ideal para bacterias. De esta manera, utilizar programas de lavado a 30 o 40 grados no garantiza la eliminación completa de estos microorganismos, algo que puede derivar en malos olores e incluso irritaciones en la piel. Por ello, los especialistas recomiendan ajustar la temperatura del lavado a al menos 60 grados para asegurar una limpieza eficaz.
Además de la temperatura, otros factores influyen en el resultado del lavado. Es importante separar las toallas del resto de la colada, especialmente si son blancas, y utilizar un detergente adecuado que combine eficacia con suavidad. También se aconseja aprovechar los programas específicos de secadora, que no solo mejoran la textura de las toallas, sino que prolongan su vida útil.
El desconocimiento sobre los programas de lavado disponibles en las lavadoras modernas es habitual. Aunque algunos ciclos están claramente etiquetados, otros pueden resultar confusos. Cada tipo de tejido —algodón, seda, lana, sintéticos— requiere un tratamiento específico, y no todos los programas económicos garantizan una limpieza profunda.
En definitiva, para mantener una correcta higiene en el hogar y evitar problemas dermatológicos, conviene prestar atención a los detalles del lavado. Elegir el programa adecuado y ajustar la temperatura son pasos clave para cuidar tanto la ropa como la salud.
