Ni EasyJet ni Ryanair: esta es la aerolínea con los asientos más minúsculos
Un número tan pequeño pero que marca la diferencia entre un viaje placentero y una auténtica lata.

¿Cómo una cosa tan pequeña puede agradarnos o amargarnos tanto? Hablamos del tamaño de los asientos de los aviones, la diferencia crucial entre tener un viaje placentero y una auténtica lata. Es una medida que varía según la aerolínea y la clase de aeronave, pero en general, en clase turista se sitúa entre los 43 y los 46 centímetros (de menos a más en función de lo largo que sea el recorrido que se necesita cubrir), mientras que en clases superiores, como Business o Primera, los asientos son más anchos y ofrecen mayor distancia entre ellos, superando los cincuenta 50 centímetros de anchura en algunos casos.
El tamaño de los asientos de avión puede ser motivo de amargue hasta en el viaje que emprendas con más entusiasmo, y es que en aras del negocio, de poder agrandar la capacidad de los aviones y vender más pasajes, los espacios se han ido estrechando en los últimos tiempos, hasta el punto de convertirse en una auténtica tortura para los viajeros algo grandes o, sencillamente, motivo de incomodidad cuando no llevas al lado a alguien conocido.
Ahora, por lo menos, podemos saber antes de hacer una reserva lo que nos vamos a encontrar, porque el medio digital británico Which? ha hecho los cálculos para identificar qué aerolíneas ofrecen los asientos más espaciosos, ayudándote a evitar sustos. Y no, no son Ni EasyJet ni Ryanair las que peor paradas salen, pese a que se trate de compañías de bajo coste criticadas habitualmente por otros inconvenientes o incomodidades del viaje.
Según su recopilación, las aerolíneas que ofrecen los asientos de clase económica más anchos son Wizz Air, TAP Portugal, EasyJet y Lufthansa, todas con anchos de hasta 18 pulgadas (hasta 45,72 centímetros), mientras que son aerolíneas como Aer Lingus, Loganair, Jet2 y Norwegian las que tienen los asientos más estrechos, que rondan los 43 centímetros. Un par de centímetros que lo son todos, dado el momento de meterse en las latas de sardina que a veces son los aviones.
No existe un tamaño mínimo universal establecido por ley en asientos de avión para la clase económica; en su lugar, las aerolíneas deciden las dimensiones para optimizar la capacidad, lo que ha llevado a la reducción del espacio a lo largo de los años. Aún así, no estamos hablando sólo de un problema de dinero o comodidad, por lo que existen propuestas legislativas para establecer tamaños mínimos por cuestiones de seguridad. Es una pelea, por ejemplo, iniciada por la autoridad de la FAA. Iniciativas que coinciden en paralelo con ideas para reducir aún más el espacio, como viajar de pie, que salen ocasionalmente en redes sociales.
Algunos trucos
Por ahora, se sigue dejando la responsabilidad en el viajero, quien puede optar por clases superiores o pagar por dos asientos. Aún así, hay algunos trucos que pueden ayudar a tener algo más de espacio. Por ejemplo, si se quiere más comodidad para las piernas, los asientos delanteros o las salidas de emergencia son los que ofrecen más espacio. Las posibilidades de conseguir un asiento de este tipo aumentan si se reserva con suficiente antelación o si se está dispuesto a gastar más dinero en el asiento, claro.
Otra idea para maximizar el espacio sin gastar más es reservar un asiento ubicado justo detrás de las mamparas, cortinas o biombos que dividen el avión. Al no haber asientos delante, tendrás suficiente espacio para estirar las piernas. Sin embargo, pueden ser un poco más estrechos si las bandejas se guardan en el apoyabrazos.
Si estás en un vuelo que ya está en el aire y ves asientos libres adicionales, siempre puedes preguntar amablemente a la tripulación de cabina si sería posible cambiar el tuyo, con su permiso.
Una cosa está clara: el asiento perfecto no existe, como no existe la compañía perfecta ni la cuenta corriente perfecta. Bueno, a lo mejor esto último...
