Tira 640 millones de euros a la basura, los busca de nuevo durante 12 años y aún le aguarda una nueva sorpresa
"Esta es la primera vez que puedo mostrar realmente lo que queríamos hacer en el vertedero. No me doy por vencido", afirma.

Durante doce largos años, James Howells, un emprendedor galés de 39 años, intentó en vano recuperar el disco duro que contenía su fortuna perdida: unos 640 millones de euros en Bitcoin. Ahora, una década después, su increíble historia está a punto de dar un nuevo giro, esta vez en la pantalla.
Todo comenzó en el verano de 2013, en la ciudad de Newport, al sur de Gales. Howells, técnico informático de profesión, tiró accidentalmente a la basura un viejo disco duro que contenía los datos de acceso a su billetera digital con más de 8.000 bitcoins, adquiridos en los primeros años de la criptomoneda, cuando apenas tenían valor. Ahora equivalen a 742 millones de dólares (aproximadamente 649 millones de euros).
Durante más de una década, Howells emprendió una búsqueda casi imposible: recuperar el disco duro enterrado en el vertedero municipal. Contrató ingenieros, financió estudios de terreno y hasta diseñó un plan de excavación con tecnología avanzada para localizar el dispositivo. Pero sus esfuerzos se toparon con una pared legal. En enero de 2025, los tribunales británicos le negaron el permiso para excavar el vertedero, argumentando riesgos medioambientales y de seguridad pública.
Un nuevo capítulo en la pantalla
Pese a la derrota judicial, a James Howells se le abre ahora una nueva oportunidad. La BBC afirma que sus aventuras serán adaptadas por la productora estadounidense LEBUL, que ha adquirido los derechos exclusivos para desarrollar una serie documental titulada 'El Bitcoin enterrado: La búsqueda del tesoro real de James Howells'.
La producción, que verá la luz a finales de este año, recreará con detalle los altibajos del informático galés, desde sus inicios en el mundo de las criptomonedas hasta su enfrentamiento con las autoridades locales. Howells se muestra "entusiasmado" con la idea: "Estoy emocionado de finalmente poder contar la historia con mis propias palabras".
"Esta es la primera vez que puedo mostrar realmente lo que queríamos hacer en el vertedero. No me doy por vencido", añade.
La serie, producida desde Los Ángeles, incluirá también un podcast y contenidos de formato corto, que seguirán los intentos del protagonista por comprar el vertedero donde, según él, sigue enterrado su tesoro digital. "Será como una búsqueda del tesoro en directo, por así decirlo, porque aunque el tribunal me haya dicho que no, no voy a darme por vencido", afirma Howells.
Un proyecto con ambiciones globales
LEBUL ha descrito la docuserie como una mezcla de thriller tecnológico y aventura real, con una puesta en escena cinematográfica y abundantes efectos CGI para recrear los momentos clave de la historia. "Esto no es solo contenido. Es un thriller tecnológico de acción real con casi mil millones de dólares en juego, y LEBUL se enorgullece de presentarlo al mundo", señala Reese Van Allen, representante de la compañía.
La productora también ha informado de que la serie ya ha despertado un fuerte interés entre patrocinadores globales, líderes del sector de las criptomonedas y principales plataformas de streaming, lo que augura una distribución internacional.
El propio Howells ha explicado que su historia ha atraído una atención inusual. "Todo el mundo quería filmar esto", cuenta, asegurando haber recibido unas 200 ofertas de productoras de todo el mundo, incluidas compañías galardonadas con premios BAFTA y Emmy. Sin embargo, hasta ahora, el momento "no era el adecuado" debido a las batallas legales que lo mantenían atado a los tribunales.
La odisea de James Howells se ha convertido en una especie de leyenda moderna entre los entusiastas de las criptomonedas. Su caso simboliza tanto el auge y volatilidad del mundo digital como los riesgos de la falta de respaldo físico en los activos criptográficos.
