Un hombre en Burgos descubre nidos de golondrina en casa y tras su acción le sobrevuela una multaza
La sanción puede rondar los 200.000 euros.

Muchas aves se instalan en los edificios altos para poner sus huevos. Así, es común ver nidos bajo el voladizo del tejado, esa parte que sobresale de la fachada y ofrece el refugio ideal para diversas especies.
Si bien estos nidos pueden resultar molestos por el ruido o los excrementos, es conveniente pensárselo dos veces antes de eliminarlos, ya que no es legal, sino que se estaría incurriendo en un delito ambiental.
Esto lo ha podido comprobar de primera mano un hombre de 78 años en la comarca de Arlanza, Burgos, quien podría enfrentarse a una multa de hasta 200.000 euros tras destruir 16 nidos de golondrina situados en su edificio.
Tal y como señala la Revista Jara y Sedal, la denuncia partió de un vecino que alertó al SEPRONA, unidad de la Guardia Civil especializada en delitos medioambientales. Como consecuencia, el cuerpo policíal puso a disposición judicial al hombre por un delito contra la flora y la fauna.
Durante la inspección, los agentes encontraron marcas circulares de barro en el voladizo que evidenciaba la destrucción de los nidos. También había restos en la acera y en vehículos aparcados bajo la fachada del inmueble.
A su vez, algunas golondrinas intentaban reconstruir sus hogares en el mismo lugar, lo que demuestra el marcado instinto de anidamiento de esta especie migratoria, que regresa cada primavera a los mismos sitios para reproducirse.
La elevada cuantía de la sanción se explica por la Ley 42/2007 del Patrimonio Natural y la Biodiversidad, que protege expresamente a las golondrinas y prohíbe dañar sus nidos, estén habitados o no. Esta especie, incluida en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, goza de una protección legal reforzada.
