Un médico, investigador y remero se enfrenta al famoso mito sobre beber whisky salado cuando hace calor
"No es necesario".

Hacer ejercicio en verano puede resulta muy desagradable por la mayor sensación de cansancio. Janne Hietamaki narra en Ilta-Sanomat que, tras realizar un trayecto en bicicleta de poco menos de 100 kilómetros sintió que había hecho un esfuerzo "mucho mayor" al habitual. "El calor, al que no estoy habituado, y los 1.000 metros de desnivel convirtieron la ruta en un verdadero reto", precisa.
A pesar de las condiciones relativamente "difíciles", completó el trayecto en poco más de cuatro horas. "Sin embargo, la sensación de debilidad y el calor abrasador me acompañaron durante casi toda la jornada", cuenta. "Lo curioso es que, después de correr, y ya entrada la noche, me sentí completamente normal", añade.
Al comentar lo ocurrido con el médico, remero e investigador Joel Naukkarinen, quien confirmó que, según lo descrito, su hidratación había sido la correcta y que una deficiente podría haber sido contraproducente si continuaba sintiéndose débil después de la carrera.
Naukkarinen advierte que "sentirse mal durante el ejercicio indica que el cuerpo se está sobrecalentando". "El sistema de termorregulación aún no estaba lo suficientemente desarrollado como para eliminar el calor durante el ejercicio", apostilla.
De hecho, le dice que también él ha notado cómo el calor afecta su rendimiento durante los entrenamientos. "Durante el ejercicio matutino de remo, mi frecuencia cardíaca era claramente más alta de lo normal", comenta. El motivo es que el cuerpo necesita redirigir más sangre hacia la piel para disipar el calor, lo que exige un mayor trabajo del corazón.
Además del calor, el estrés y la deshidratación también elevan la frecuencia cardíaca. Por ello, Naukkarinen recomienda comenzar cualquier actividad física con moderación y prestando atención a las señales del cuerpo.
¿Es efectivo el whisky salado?
¿Qué más conviene tener en cuenta cuando se hace ejercicio bajo altas temperaturas? Una buena hidratación es esencial, así como elegir actividades que permitan mantenerse fresco o a la sombra.
Respecto al popular consejo de beber whisky salado en vez de agua, Naukkarinen aclara: "Cuando el cuerpo se ha adaptado mejor al calor y es capaz de absorber mejor las sales, no es necesario un aporte adicional de sales o electrolitos". Eso sí, en condiciones muy calurosas o con mayor esfuerzo físico, pueden ser útiles.
"El estado de ánimo es lo mejor que puedes escuchar cuando hace calor", afirma. "Un factor desafiante en el agotamiento por calor y el golpe de calor es que pueden desarrollarse de manera sorprendentemente insidiosa".
