Un párroco critica cómo los padres escogen últimamente a los padrinos y pide un mayor compromiso con la elección
"Se ha convertido en una especie de demostración de amistad", asegura.
Para muchos, la figura del padrino ha cambiado significativamente desde la década de los 2000. Una teoría que Esko M.Laine, un párroco en Helsinki (Finlandia) respalda. Él cree que elegir al padrino "se ha convertido en una especie de demostración de amistad, para fortalecer relaciones".
En declaraciones recogidas por el medio finés Helsingin Sanomat, el cura asevera que "cuánto más grande son las ciudades y los grupos de edad más jóvenes, mayor es la importancia de los amigos. Más incluso que los familiares". Para él, la elección refleja "generalmente" el deseo de comprometer a las personas que se consideran importantes para la vida de su propia familia.
De acuerdo a la información difundida, Laine lleva 20 años ejerciendo en una parroquia de la capital finlandesa, donde a los jóvenes se les ha dado la tarea de escribir una carta a sus padrinos. No obstante, muchos de ellos se negaron. "Cuando comenzamos a discutir las razones subyacentes, quedó claro que los jóvenes tienen más expectativas de los padrinos de lo que podrían haber imaginado", asegura el párroco.
Según Laine, la "decepción" más recurrente es que el padrino "no se ha mantenido en contacto" o "no ha resultado ser el tipo de persona a la que el joven podría haber recurrido o incluso contactado". Desde 2006, en Finlandia es posible cambiar de padrino si se es menor de 18 años.
Sin embargo, Henri Järvinen, sacerdote de la Unidad de Investigación y Educación de la Iglesia en ese país, recuerda que "no es posible eliminar un antiguo padrino de los registros eclesiásticos". Aun así, reitera que "la elección de nuevos patrocinadores todavía no es un gran fenómeno, pero sucede". "Creo que mucha gente ni siquiera conoce esta oportunidad todavía", concluye.