Una pareja de jubilados estadounidense desglosa sus cuentas y revela que vivir a todo lujo en un pueblo de España les cuesta un 40% menos que en su país: "Allí pagaríamos 3.200 dólares por algo peor. Es un ahorro brutal"'
Wade y Jesse han decidido abrir su libro de contabilidad para mostrar al mundo la abismal diferencia económica que existe entre intentar sobrevivir en California y vivir a cuerpo de rey en la Costa del Sol.
Wade y Jesse decidieron mudarse a España tras darse cuenta de que el ritmo frenético de la vida en Estados Unidos los estaba consumiendo.
Su historia, compartida a través de los micrófonos de Spain Guru —un canal de YouTube —, se ha convertido en un caso de estudio sobre cómo el "arbitraje geográfico" puede salvar una jubilación.
Agobiados en Estados Unidos
Wade recuerda con claridad el momento exacto en el que él y Jesse dijeron "basta". No fue una decisión impulsiva, sino la consecuencia de un agotamiento sistémico. “Fue hace aproximadamente un año que estaba en una gran racha abriendo unos nuevos negocios, estaba viajando un montón, volví de vuelta a casa en Los Ángeles, donde estábamos viviendo en ese momento y dije: 'Suficiente, terminamos con esto' y ahí fue el momento que iniciamos nuestro proceso de visado”, declara el norteamericano.
El sueño americano se había convertido en una jaula de oro demasiado cara de mantener, y necesitaban una salida.
Refugio en España
Tras barajar opciones, la brújula apuntó al sur de Europa. "Nos enamoramos de Málaga y sus alrededores. El clima es hermoso, la gente es increíblemente acogedora y cálida", relata Jesse. Más allá del sol, la pareja destaca el equilibrio cultural: "Hay una rica historia aquí, pero también todas las comodidades modernas que necesitamos".
Además, la integración fue sorprendentemente rápida: "Incluso en el poco tiempo que llevamos aquí, hemos conocido a mucha gente maravillosa, tanto locales como otros expatriados", manifiestan, destacando que la soledad no ha sido un problema.
La matemática del ahorro: de 5.000 a 3.000 dólares
Donde Wade se muestra más contundente es en el análisis financieroa: "Ahorramos brutalmente a comparación de cuando vivíamos en Estados Unidos”. El alquiler de la vivienda, el seguro médico, la compra del supermercado e incluso los servicios veterinarios de su perro son gastos que han resultado más económicos en España que en su país natal, explica Wade.
Solamente la compra de un coche y la factura de electricidad son dos ítems que saldrían menos costosos en Norteamérica. “El coste de vida en los Ángeles era de 5.000 dólares al mes, mientras que acá ronda los 3.000, es 40% económico, para nosotros, vivir en España", sostiene el hombre