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Vuelta... al mundo: la reacción de la prensa internacional al "final inédito" de la carrera

Vuelta... al mundo: la reacción de la prensa internacional al "final inédito" de la carrera

Las crónicas se dividen entre la frustración por la vertiente deportiva y el análisis por la toma de conciencia política, de los ciudadanos y del Gobierno de España. 

Un manifestante ondea una bandera palestina en las barricadas creadas con vallas y carteles de La Vuelta, el 14 de septiembre de 2025, en Madrid.Alberto Gardin / Eurasia Sport Images / Getty Images

Lo de ayer en La Vuelta fue histórico. La última etapa de la principal prueba ciclista de España fue suspendida por seguridad, ante las masivas protestas propalestinas en las calles de la capital. Un hecho insólito que la prensa internacional recoge en estas horas con una doble vertiente: la deportiva y la política. En el primer flanco, pesa la idea de la frustración de los corredores. En el segundo, el peso que tiene hoy la voz española en la lucha contra el "genocidio" en Gaza, como lo llama el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. 

La falta de podio y ceremonias, que llevaron a que el danés Jonas Vingeggard se coronase vencedor en un aparcamiento, es calificado de "inédito" por la mayoría de medios. "Ganó oficialmente su primera Vuelta, sin embargo, no hubo ganador de etapa, ya que se interrumpió a 60 km de la meta debido a una nueva manifestación pro-palestina", resalta la biblia del periodismo deportivo europeo, L'Equipe.

La forma de finalizar la Vuelta es reseñado por el diario francés como "algo inédito en la historia de las grandes vueltas". "Cargas policiales, balas de goma, barreras transformadas en instrumentos de violencia, el centro de Madrid se derrumbó como el final de esta frenética Vuelta a España 2025. La Vuelta a España terminó de la peor manera posible, sin final", describe. 

El medio galo incorpora una pieza explicando el porqué de las protestas de estos días, más allá de Madrid. "Tradicionalmente, la sociedad española ha sido bastante unánime en el apoyo a los derechos del pueblo palestino. Esto se debe principalmente a que esta movilización es transversal en cuanto a ideologías, lo que permite aglutinar a más personas", expone. Y más: "En la Vuelta, es una reacción basada en la emoción, pero menos espontánea porque cuenta con el apoyo de diversos partidos de izquierda y jóvenes. Lo que buscan es, sobre todo, protestar contra la doble moral entre el discurso político y la presencia de este equipo en la carrera, cuando ya existe un precedente muy claro con Rusia", indica un experto entrevistado por el diario. 

El portal de deportes Sporza, de Bélgica -donde son unos enamorados del ciclismo y esta prueba se seguía con ansia- se habla de "tono sombrío" en el final de La Vuelta: "las protestas multitudinarias en Madrid obligan a los organizadores a cancelar la etapa final y la ceremonia del podio". "El caos reinó en las calles de Madrid, donde las barreras quedaron reducidas a escombros. La organización de la Vuelta intentó con todas sus fuerzas que Vingegaard se enfundara el maillot rojo en Madrid, pero los numerosos manifestantes que se habían concentrado decidieron lo contrario". Luego, destaca cómo se registraron unas "imágenes excelentes" de los ciclistas en el aparcamiento que se buscó como plan b para la entrega de premios. "Los corredores decidieron organizar algo ellos mismos", aplaude. 

Más dura es la radiotelevisión pública belga, la RTBF, que habla de una "vergüenza internacional" en Madrid. Destaca la pelea política generada por este caso, pero sitúa las críticas del Partido Popular por encima de la defensa de la causa hecha desde el Gobierno de PSOE y Sumar. Sus principales entrecomillados son para Alberto Núnez Feijóo y el sindicato policial JUPOL. Afirma que la carrera acaba con "otro estallido" y "los velocistas perdieron una de sus pocas oportunidades de brillar".

En Italia, La Gazzetta dello Sport resalta que "Jonas Vingegaard se coronó campeón de la Vuelta a España tras una carrera llena de drama y tensión". "La Vuelta a España terminó de la peor manera posible, sin final", añade. Sin embargo, en otros medios generalistas italianos, como el Corriere della Sera, se centran en lo político: también hablan de "caos" y de "batalla" pero añaden que las protestas son "sostenidas" por la "tendencia" de las protestas contra el ataque a Gaza de otros ámbitos en España. 

En Francia, en Le Monde, la portada de su edición web dedica una foto a un manifestante propalestino en las calles de Madrid con el siguiente titular: "Vuelta a España: La última etapa se detiene definitivamente tras la invasión del recorrido por activistas propalestinos". En el interior de la noticia se puede leer el desarrollo de los acontecimientos durante la última etapa, mientras que el diario recuerda que la Vuelta fue "muy accidentada" y resalta las posturas de los líderes políticos españoles sobre los manifestantes y los hechos acontecidos en la Vuelta a España.

Pone contexto a lo ocurrido:"¿Por qué una carrera ciclista se vio envuelta en el corazón de una crisis geopolítica? El primer objetivo de los manifestantes: el equipo israelí Israel-Premier Tech, cuya participación está siendo cuestionada, mientras que los atletas rusos y bielorrusos han sido vetados de las competiciones internacionales desde el estallido de la guerra en Ucrania. Liderados por el multimillonario Sylvan Adams, partidario del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y cuya tarjeta de presentación decía "autoproclamado embajador de Israel" cuando se lanzó el equipo, el equipo ha llamado la atención".

Y recuerda el medio galo que "en un país que ha reconocido a Palestina y donde las tensiones con el gobierno israelí de Netanyahu se han reavivado tras el anuncio de Pedro Sánchez de medidas destinadas a "poner fin al genocidio en Gaza", conocidas justo el lunes pasado. Una curiosidad: a la hora de destacar la visión de la oposición, del PP, a la que se cita es a Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, no a Feijóo. 

El portal del diario neerlandés De Telegraaf (otro país donde el ciclismo es dios) resalta que manifestantes propalestinos detuvieron la Vuelta en Madrid y destaca que "ni siquiera la última etapa" se libró de las protestas. "Sin duda, fue una Vuelta marcada por las múltiples protestas pro-palestinas, que provocaron el acortamiento de varias etapas, situaciones peligrosas durante la etapa e incluso la cancelación prematura de otra. Esto también ocurrió el domingo en las calles de Madrid", apunta.

Añade el papel de Pedro Sánchez, que "elogia" a los manifestantes. “En este complejo contexto internacional, España brilla hoy como motivo de orgullo y como ejemplo para una comunidad internacional que ve en España un paso adelante en la defensa de los derechos humanos”, señaló con satisfacción el presidente del Gobierno español y ellos lo destacan así. Sin adjetivar, el mismo medio expone que "los ciclistas israelíes recibieron amenazas de muerte y fueron intimidados durante el recorrido. También les lanzaron chinchetas".

En Reino Unido, por su parte, The Guardian destaca la victoria de Vingegaard "tras la cancelación de la última etapa en medio de las protestas pro palestinas en Madrid" e informa de que los manifestantes detuvieron "repetidamente" a los ciclistas y se enfrentaron a la policía durante la última etapa de la carrera. "Los enfrentamientos se produjeron horas después de que el primer ministro, Pedro Sánchez, expresara su admiración por los manifestantes propalestinos, cuyas actividades a lo largo del recorrido de la carrera llevaron a algunos ciclistas a amenazar con abandonar la competición la semana pasada", añade. 

En el plano político, el diario progresista amplía el foco y recuerda que es un problema que va más allá de la Vuelta española: "El colapso de la tercera Gran Vuelta más importante del año ha sumido en una crisis el circuito mundial, con la continua presencia del equipo Israel Premier Tech, recientemente respaldado por Benjamin Netanyahu, siendo blanco de las protestas cada vez más enfurecidas de los grupos de protesta en las cunetas. Hace una semana, ante la creciente presión sobre el equipo, propiedad del multimillonario empresario Sylvan Adams, para que se retire de la Vuelta, Netanyahu publicó: "¡Excelente trabajo de Sylvan y del equipo ciclista israelí por no ceder al odio ni a la intimidación! ¡Hacen que Israel se sienta orgulloso!".

En la BBC recuerdan que las protestas de días atrás habían hecho que los ciclistas estuvieran "preocupados" por su seguridad. Destacan el reguereo de reacciones políticas, de Sánchez al alcalde José Luis Martínez-Almeida, y dan especial espacio a la respuesta de Israel: "El ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Gideon Saar, calificó a Sánchez y a su gobierno de "vergüenza" para España".

Y el diario deportivo portugués A Bola informa del final de la Vuelta en medio de las protestas pro-palestinas: "Miles de personas invaden el circuito final de la carrera en la capital española. Los organizadores deciden dar por finalizada la carrera a poco más de 60 kilómetros de la meta". También destacan el "ingenio" de los deportistas para inventarse una entrega de premios alternativa y la "corriente social" que evidencian las protestas. 

¿Y los israelíes?

Los medios israelíes, en su mayoría, compran la lectura del Gobierno de Netanyahu y no hablan siquiera de protestas propalestinas, sino antiisraelíes. No es que den un enorme protagonismo a la noticia, no, en un momento en el que hay una visita en el país del secretario de Estado norteamericano o se intensifica la operación sobre la ciudad de Gaza, pero lo que pesa es la crítica al Gobierno de Sánchez por el de Tel Aviv. 

El Jerusalem Post, por ejemplo, destaca el "respaldo" de Moncloa a los manifestantes y que en la diana estaba el equipo Israel-Premier Tech. Sin embargo, el progresista Haaretz sí que habla de una protesta "proGaza" que es un ejemplo de la "sensibilidad" con la causa de la ciudadanía española, más allá del grupo que salió ayer a la calle. 

También añade contexto, porque la pelea está llegando al ciclismo en muchas otras convocatorias: "En abril, el movimiento de boicot, desinversión y sanciones culpó a las tres principales carreras ciclistas del mundo -el Tour de Francia, el Giro de Italia y la Vuelta a España- de 'ayudar a Israel a maquillar sus graves crímenes contra los palestinos'. El BDS afirmó que 'los organismos deportivos internacionales tienen la obligación moral de tomar todas las medidas necesarias para prevenir el genocidio, o se arriesgan a ser considerados penalmente responsables'". En Canadá, también, "la organización de derechos humanos Unidad Palestina y Judía (PAJU), con sede en Montreal, ha pedido a las autoridades municipales que excluyan a Israel-Premier Tech del Gran Premio Ciclista de Montreal, advirtiendo que la participación del equipo contribuiría al «maquillaje deportivo» en medio de la actual guerra de Gaza".

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Soy redactora centrada en Global y trato de contar el mundo de forma didáctica y crítica, con especial atención a los conflictos armados y las violaciones de derechos humanos.

 

Sobre qué temas escribo

Mi labor es diversa, como diverso es el planeta, así que salto de Oriente Medio a Estados Unidos, pero siempre con el mismo interés: tratar de entender quién y cómo manda en el siglo XXI y cómo afectan sus decisiones a la ciudadanía. Nunca hemos tenido tantos recursos, nunca hemos tenido tanto conocimiento, pero no llegan ni las reformas ni la convivencia prometidas. Las injusticias siempre hay que denunciarlas y para eso le damos a la tecla.

 

También tengo un especial empeño en la actualidad europea, que es la que nos condiciona el día a día, y trato de acercar sus novedades desde Bruselas. En esta ciudad y en este momento, la defensa es otra de las materias que más me ocupan y preocupan.

 

Mi trayectoria

Nací en Albacete en 1980 pero mis raíces son sevillanas. Estudié Periodismo en la Universidad de Sevilla, donde también me hice especialista en Comunicación Institucional y Defensa. Trabajé nueve años en El Correo de Andalucía escribiendo de política regional y salté al gabinete de la Secretaría de Estado de Defensa, en Madrid. En 2010 me marché como freelance (autónoma) a Jerusalén, donde fui corresponsal durante cinco años, trabajando para medios como la Cadena SER, El País o Canal Sur TV.

 

En 2015 me incorporé al Huff, pasando por las secciones de Fin de Semana y Hard News, siempre centrada en la información internacional, pero con brochazos de memoria histórica o crisis climática. El motor siempre es el mismo y lo resumió Martha Gellhorn, maestra de corresponsales: "Tiro piedras sobre un estanque. No sé qué efecto producen, pero al menos yo tiro piedras". Es lo que nos queda cuando nuestras armas son el ordenador y las palabras: contarlo. 

 

Sí, soy un poco intensa con el oficio periodístico y me preocupan sus condiciones, por eso he formado parte durante unos años de la junta directiva de la ONG Reporteros Sin Fronteras (RSF) España. Como también adoro la fotografía, escribí  'El viaje andaluz de Robert Capa'. Tuve el honor de recibir el XXIII Premio de la Comunicación Asociación de la Prensa de Sevilla por mi trabajo en Israel y Palestina y una mención especial en los Andalucía de Periodismo de la Junta de Andalucía (2007). He sido jurado del IV Premio Internacional de Periodismo ‘Manuel Chaves Nogales’.

 

 


 

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