Jon Sistiaga habla de la victoria de Kast en Chile y da la clave para que los jóvenes se alejen de la ultraderecha
"No se dan cuenta de que se puede revertir todo lo conseguido".
El auge de la ultraderecha vuelve a dar síntomas de fortaleza tras la victoria en Chile de José Antonio Kast, un admirador y nostálgico de la dictadura de Augusto Pinochet. De ello ha hablado Jon Sistiaga en La Ventana, programa que conduce Carles Francino en las tardes de la Cadena SER.
El periodista vasco, reconocido por sus reportajes en zonas de guerra, ha analizado a esta cuestión, destacando que la victoria de Kast es transversal a todos los estratos de la sociedad chilena. "El triunfo de Kast en todas las franjas sociales demuestra que no solo le han votado los nostálgicos de Pinochet, sino también sus hijos", ha apuntado en los micrófonos de la SER.
En esta línea, ha señalado que la sociedad chilena, especialmente los más jóvenes, puede ver cómo se da un paso atrás en los derechos conquistados desde la caída de la dictadura militar. "No se dan cuenta de que se puede revertir todo eso que se ha conseguido en los 30 últimos años y les parece hasta normal", ha opinado el periodista.
"Es la única forma"
Al hilo de esta cuestión, Jon Sistiaga ha sido rotundo sobre lo que supone votar por opciones políticas próximas a la ultraderecha, y ha dado lo que, para él, es la clave para frenar a partidos con ideas que atentan contra los derechos más esenciales de las sociedades democráticas.
"Jugar con sus mismas cartas en redes sociales, creo que es la única manera que tenemos de hacer ver a esta gente joven qué significa votar por este tipo de opciones", ha dicho a Carles Francino, que comparte el análisis del periodista vasco. "Si en algo se parecen Chile y España es que a sus dictadores no les echaron. Por el Pinochetismo y el Franquismo nunca han desaparecido", ha recordado a los oyentes de La Ventana.
Las palabras de Carles Francino se basan en las opiniones manifestadas por Kast en 2017, cuando afirmó "si estuviera vivo, votaría por mí", refiriéndose al dictador Pinochet. En otras ocasiones, ha defendido de forma reiterada el legado político y económico de la dictadura militar, llegando a cuestionar los consensos alcanzados tras la vuelta de la democracia.