El ciclismo que nos espera

El ciclismo que nos espera

La temporada que echa a andar rebosa argumentos para que los buenos aficionados al ciclismo no pierdan detalle. Las razones que nos hacen pensar en un año espectacular son múltiples, son los argumentos de los que llegan frente a los que se van, de las figuras emergentes frente a los campeones consagrados.

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Primera etapa de Tour Down Under 2016/EFE

La temporada de ciclismo ya ha comenzado y lo ha hecho evitando el rigor del frío invierno, buscando la clemencia de los trópicos, en latitudes tan dispares como alejadas de la tradición del ciclismo europeo. Argentina, Australia, Emiratos Árabes o Qatar son los nuevos escenarios donde la UCI experimenta su globalización y donde las estrellas dan las primeras pedaladas de una temporada cada vez más estirada, salpicada desde el primer mes del año con pruebas de primer nivel.

Será en el mes de marzo cuando el ciclismo se instale definitivamente en el viejo continente, superando estas primeras salvas de invierno, y los líderes que aspiran a las grandes vueltas deban cumplir con sus primeros objetivos sustanciales.

La temporada que echa a andar rebosa argumentos para que los buenos aficionados al ciclismo no pierdan detalle. Las razones que nos hacen pensar en un año espectacular son múltiples, son los argumentos de los que llegan frente a los que se van, de las figuras emergentes frente a los campeones consagrados. Habrá nuevos actores en todos los terrenos, en carreras de un día y vueltas grandes, fichajes estrella que alterarán la guerra de bloques pero, sobre todo, habrá grandes duelos, como una repetición constante de una obra inacabada a la que cada vez se suman más protagonistas.

Giro, Tour y Vuelta concentrarán al elenco de ganadores más dilatado de las últimas décadas. De la misma manera que el año pasado vivimos un Tour histórico, por darse cita en una misma edición cuatro líderes indiscutibles, posibles ganadores a partes iguales, esta temporada viviremos una y otra vez los mismos duelos entre ese grupo de elegidos. Resulta difícil recordar un momento pasado en el que coexistieran tantos "primeras espadas" que abriesen un abanico de posibilidades como el que se nos plantea en este 2016.

Veteranía y juventud se entremezclan entre los actuales ganadores de grandes vueltas: Fabio Aru (25, Astana), Nairo Quintana (25, Movistar), Chris Froome (30, Sky), Vincenzo Nibali (31, Astana) y Alberto Contador (33, Tinkoff), son los cinco "outsiders", los cinco hombres que optan a repartirse las mejores victorias, y a ellos debemos sumar a los emergentes, a Mikel Landa (26, Astana) y Tom Dumoulin (25, Giant-Alpecin), que han demostrado ser candidatos sólidos para carreras de tres semanas y así los presentarán sus respectivos equipos.

Este 2016 será también un año para confirmaciones. Ciclistas que irrumpieron la temporada pasada en el panorama internacional dejando huellas de una calidad, en diferentes terrenos, que debe dar sus frutos este curso en forma de triunfos. El colombiano Esteban Chaves (26, Orica GreenEDGE) brilló, con dos victorias, en la montaña de la pasada Vuelta a España; Ilnur Zakarin (26, Katusha) hizo una primera parte de la temporada a gran nivel, ganando el Tour de Romandía y obteniendo una victoria de etapa en el Giro de Italia; Diego Rosa (26, Astana), siguiendo la estela de sus compañeros y compatriotas Nibali y Aru, parece llamado a brillar en las pruebas de tres semanas, habiendo demostrado también su capacidad para carreras de un día con la victoria de la última Milán-Turin.

En el próspero panorama de la velocidad actual, con un gran número de sprinters de primer nivel, además del retorno de Marcel Kittel (27, Etixx-Quick Step) quien, tras deslumbrar en 2014 tuvo un 2015 absolutamente gris (este invierno ya ha vuelto por la senda de los triunfos en el reciente Tour de Dubai), se espera también a Caleb Ewan, un jovencísimo australiano (21, Orica GreenEDGE) ganador de una etapa en la Vuelta y que ya ha empezado marcando terreno este año con dos victorias en el Tour Down Under. Si en Francia tenían motivos para la ilusión en 2015 con los escaladores Thibaut Pinot (25, FDJ) y Romain Bardet (25, Ag2r La Mondiale), 2016 les ofrece uno más, en este caso para las clásicas, con Julian Alaphilippe (23, Etixx-Quick Step). Fácil acordarse de sus dos segundos puestos en Flecha Valona y Lieja Bastoña-Lieja, ya que por delante quedó un pletórico Valverde.

2016 nos da también la oportunidad de revivir un duelo histórico, un duelo que veremos por última vez este año, el que tendrá lugar sobre las carreteras rotas del pavés. Fabian Cancellara (34, Trek-Segafredo) y Tom Boonem (35, Etixx-Quick Step) han dominado la escena de los adoquines de las clásicas de primavera desde hace ya más de una década. Ambos cuentan con tres victorias en el Tour de Flandes, mientras que en la París-Roubaix el belga se sitúa por delante del suizo: cuatro victorias a tres. Números espectaculares que les sitúan en el Olimpo de los clasicómanos, compartiendo trono con nombres de leyenda como Roger De Vlaeminck, Rik Van Looy, Francesco Moser, Johan Museeuw o Eddy Merckx.

Será este 2016 un año de duelos, de jornadas para el recuerdo, de exhibiciones sobre el pavés y de la épica de las cumbres. Un año también de despedidas anunciadas, de una generación que se va frente a otra que llega; un ciclo perenne que confluirá en Río de Janeiro, en unas olimpiadas deseadas por todos pero, antes, abril nos regalará el último duelo de dos leyendas vivas, no se lo pierdan.

Este post ha sido publicado inicialmente en el blog del autor