El dueño de un taller se harta de los empleados que le piden salarios astronómicos y empieza a aplicar porcentajes
"No contrato por salario, sino por porcentaje".

Un joven empresario rumano del sector de la automoción ha decidido romper con la fórmula tradicional de pagar sueldos fijos a sus empleados. Según cuenta al medio Romania TV "no contrato por salario, sino por porcentaje".
Cătălin, propietario de un taller mecánico, asegura que estaba cansado de que en las entrevistas de trabajo los candidatos exigieran salarios muy por encima de lo que, en su opinión, valía su desempeño. La solución que encontró fue aplicar un sistema basado en porcentajes: cada trabajador cobra en función de lo que produce.
“Estoy harto de todos. No hablamos de un 10 o 20% simbólico, sino de un porcentaje real. Recibes tu dinero a fin de mes o un anticipo, y el resto del pago refleja tu valor”, explicó al medio local. Según él, este sistema garantiza que si el servicio gana más gracias al trabajo de un mecánico, ese beneficio también se traslada al salario del empleado.
Un modelo que premia la productividad
Este sistema se basa en si el trabajo se realiza de manera rápida y eficiente, tanto el empleado como el dueño salen ganando. Pero si un encargo se retrasa o resulta poco rentable, las pérdidas también se reparten.
“Si no terminaste el trabajo ese día y se extiende al siguiente, no hay problema. Pero así como el servicio pierde, tú también pierdes”, señaló Cătălin, convencido de que este modelo aporta más transparencia y equidad.
Con este nuevo sistema de porcentajes, el joven empresario espera atraer a empleados más motivados y, al mismo tiempo, poner fin a la “batalla” constante por los salarios fijos desproporcionados. “Recomiendo este método y lo aplicaré con todos los que lleguen a mi taller”, concluyó.
