La mega empresa española que podría comprar Talgo y romper el sueño húngaro

La mega empresa española que podría comprar Talgo y romper el sueño húngaro

De producirse la operación, se crearía un gigante ferroviario con sede en Euskadi.

Un tren de TalgoCristina Arias / Cover / Getty Images

La Oferta Pública de Adquisición (OPA) presentada a principios de marzo por el grupo húngaro Magyar Vagon ante la Comisión Nacional de los Mercados de Valores (CNMV) para hacerse con el control de Talgo por 619 millones de euros y el anuncio del Gobierno de que se mantendrá "vigilante", sin descartar el veto a una operación que afecta a una empresa que opera en un sector estratégico ha revitalizado un rumor que aparece como el Guadiana: crear un gigante ferroviario a nivel mundial con sede en Euskadi.

Con la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) centrada en la compra de acciones de Telefónica para contrarrestar la entrada de Arabia Saudí en la compañía, que se hizo con una participación del 9,9% en una 'jugada' que sorprendió y generó inquietud en Moncloa, fuentes cercanas a la empresa ferroviaria que cita el diario Qué! señalan que el comprador ideal de Talgo está también en el País Vasco: CAF (Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles), uno de los principales fabricantes de trenes del mundo y un competidor directo desde Beasain (Guipúzcoa) en el mercado de alta velocidad.

El interés del Gobierno porque CAF compre Talgo, según explican, va unido al interés que tiene Moncloa por mejorar su relación con el PNV, socio de investidura en el Congreso y con el que probablemente tenga que sentarse a negociar después de las elecciones vascas del próximo 21 de abril, en las que las encuestas dibujan un resultado ajustado entre el Partido Nacionalista Vasco y EH Bildu para hacerse con la Lehendakaritza, lo que haría necesarias coaliciones para elegir al sucesor de Íñigo Urkullu.

De hecho, según apunta Moncloa.com, el PNV ha elevado la presión sobre la cúpula de CAF para que haga una oferta sobre el otro gran constructor ferroviario vasco, con la promesa de que los nuevos encargos de trenes se fabriquen en el País Vasco. En la planta de 40.000 metros cuadrados que tiene Talgo en el municipio de Rivabellosa (Álava). 

Los problemas que complican la operación

Sin embargo, el diario Crónica Vasca, señala algunas claves que complicarían la compra de Talgo por parte de CAF. La principal, porque su deuda se acerca a los 278 millones de euros y Kutxabank, principal accionista y acreedor, tendría problemas para asumir el riesgo que implicaría la compra de una empresa que, según indican, "son máquinas de generar ingresos pero con muy poca rentabilidad".

Más allá de otras prioridades de compra y el interés en otras áreas de negocio que pueda tener CAF, una cuestión que puede poner patas arriba una operación que, de momento no tiene visos de viabilidad, está en el accionariado de la compañía vasca: la plantilla es poseedora, en forma de acciones, del 25% del capital del fabricante de trenes. Así que, en caso de que se hagan despidos en un proceso de integración, es complicado que los trabajadores acepten un acuerdo que implique recortes de plantilla. 

Que Talgo termine en manos húngaras, mientras tanto, sigue más que presente. Después de formalizar la operación ante la CNMV el pasado 7 de marzo, Magyar Vagon dispone de un plazo de 30 días para presentar el folleto de la OPA. Durante ese tiempo, entabla contactos con las autoridades en las que recae la decisión de aprobar la operación, entre ellas el Gobierno.