Iñaki Gabilondo, sobre cómo vivió el 23-F: "Fui uno de los pocos que lo vi en directo"

El programa de TVE Lazos de Sangre ha repasado las trayectorias profesionales de tres de los periodistas más grandes del mundo radiofónico: Iñaki Gabilondo, Carlos Herrera y Luis del Olmo.

Durante el documental, los tres han valorado sus mejores momentos, han contado historias y anécdotas de su trabajo y, también, han hablado de algunos de sus peores momentos.

Gabilondo recordó el golpe de estado del 23-F, cuando era jefe de informativos de TVE. “La primera vez que salí en mi vida en televisión fue para decir a la gente que ellos en el Congreso habían sido asaltados a su vez, pero nosotros habíamos sido ocupados por unos militares que habían venido con uniforme de campaña”.

Además, explicó que él fue una de las pocas personas que lo vio en directo por televisión: “Aquel vídeo que hemos visto todos mil veces no se emitió en directo, se estaba grabando el acto porque era una rutina parlamentaria. No había otras televisiones y no había que competir con nadie, así que lo grabábamos para el telediario”.

“Yo estaba en mi despacho y lo vi en tiempo real, sin saber cómo acababa, por eso le digo a la gente que lo imagen que lo están viendo sin saber cómo acaba”, añadió.

El veterano periodista también destacó los atentados del 11-M, ya que “fue una locura brutal ver como el número de víctimas no cesaba en directo ante micrófono”.

Herrera, por su parte, señaló que los asesinatos de ETA han protagonizado los peores momentos: “Siempre he dicho que lo peor de mi trabajo durante todos estos años ha sido aquellas mañanas en las que a la hora de empezar el programa nos llegaba la noticia de que ETA había asesinado a diez guardias civiles, a dos paseantes, a un policía, un militar, un médico, etc”.

Finalmente, Del Olmo destacó el día de su retirada en 2013, cuando se despidió de los oyentes para poner el punto y final a su trayectoria. “Merche, mi mujer, me dijo que ‘por fin ya no madrugas, ya vive un poco tu vida tranquila con tus hijos y con tus nietos’”.

Años atrás, Del Olmo había descrito la radio como “una droga”: “Para quien la prueba como la estoy probando yo todos los días, que tiene ocasión de estornudar en Barcelona y que ese estornudo se escuche en cualquiera de las 54 ciudades donde tenemos emisoras, es una droga, una droga de la que no puedes prescindir”.