Pablo Iglesias sorprende con su inesperada opinión sobre la lucha del PP de Madrid y Ayuso

Pablo Iglesias sorprende con su inesperada opinión sobre la lucha del PP de Madrid y Ayuso

"No soy sospechoso de tener simpatía por el PP, pero..."

Iglesias, en la Cadena Ser.CADENA SER

Pablo Iglesias, exlíder de Podemos, ha sorprendido al asegurar que “no está bien hacer sangre”, al hablar de la ‘guerra’ por el PP de Madrid entre Génova e Isabel Díaz Ayuso.

En una intervención en El Ágora, de Hora 25 de la Cadena Ser, Iglesias ha afirmado que “hay que mantener distancia y cierta elegancia” y que “todo el mundo tiene derecho a tener esos espacios de lucha de poder”.

“Cuando hay que dirimir quién manda, uno pone encima de la mesa los recursos que tiene”, ha dicho el exlíder de Podemos, que ha subrayado que “que uno se mate simbólicamente es una cosa buena, es un avance”.

“Lo que creo que puede tener interés para la ciudadanía es si esto va dirimir quién manda en el PP”, ha asegurado antes de apuntar: “No soy sospechoso de tener simpatía por el PP, pero no he perdido raciocinio para apreciar las diferencias”.

Con todo, Iglesias ha acabado diciendo: “Me da miedo imaginarme un PP en el que mande Ayuso”. Además, ha pronosticado que si Casado tiene éxito en las elecciones generales seguirá y, si no, se irá. ”¿Ahí quien llegará? Feijóo o Ayuso? Yo auguro que Ayuso”.

Mientras Ayuso y el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, coincidirán este martes en la explanada de la catedral de la Almudena, durante la misa en honor a la Virgen homónima, en plena ‘guerra cainita’ entre Génova y Sol por la Presidencia del PP de Madrid.

Ambos comieron juntos a finales de octubre en la Real Casa de Correos, sede de la Presidencia regional, la víspera de la polémica Junta Directiva donde se puso de manifiesto la ruptura del partido entre los partidarios de adelantar el Congreso Regional del PP de Madrid y los que apuestan por seguir con los tiempos marcados por la dirección nacional.

Fue en ese encuentro donde el regidor madrileño hizo constar su preferencia de una tercera vía -manteniendo separado el poder institucional del poder orgánico del partido- como solución para poner fin a la crisis y acabar con el ruido interno. Martínez-Almeida defendió que el PP de Madrid lo presidiera una tercera persona. Sin embargo, la presidenta madrileña rechazó esta oferta de pacto e insistió en que ella daría un paso adelante.