China desarrolla un cañón de nueva generación capaz de disparar 3.000 proyectiles por minuto
Supera con creces al AK-47.

El fabricante estatal de armas China South Industries Group (CSGC) ha publicado imágenes de su cañón de bobina electromagnética, un arma que es capaz de disparar 3.000 balas por minuto. El prototipo representa un gran avance tecnológico en el armamento portátil de energía dirigida, que "supera con creces al AK-47", en palabras de la web especializada Interesting Engineering.
"Una vez perfeccionada, la nueva arma podría desempeñar un papel clave en aplicaciones militares y policiales", afirma. La mayor novedad de este invento es un cañón de bobina, es un motor lineal que utiliza electroimanes para acelerar un proyectil a alta velocidad. Se trata esencialmente de un tipo de propulsor de masa en el que el proyectil se lanza mediante fuerzas magnéticas, en lugar de pólvora o explosivos tradicionales. Según ha trascendido, la nueva arma china utiliza baterías de iones de litio en lugar de condensadores convencionales para alimentar las bobinas electromagnéticas.
Esta arma debutó apenas unos años después del lanzamiento en 2023 de otro cañón de bobina chino, el CS/LW21, y ahora se ha mejorado. El CS/LW21, otro cañón de bobina electromagnética portátil, fue desarrollado por China North Industries Group (Norinco) para el control de disturbios y tiene un uso no letal. Utiliza un conjunto de bobinas de nueve etapas alimentado por una batería interna de iones de litio para disparar proyectiles con forma de moneda sin pólvora tradicional.
Sin embargo, el cañón de bobina más reciente, desarrollado por la Universidad de Ingeniería del Ejército, "presenta un diseño sin condensadores sin precedentes que permite un fuego rápido y sostenido", una limitación histórica en el desarrollo de cañones de bobina. Según detalla el South China Morning Post, la nueva arma está equipada con veinte bobinas secuenciales de cobre de 20 mm de largo en configuración bullpup. ¿Que qué quiere decir esto? Se refiere a un formato de arma de fuego, en el cual los mecanismos y el cargador se encuentran detrás del disparador. Esto incrementa la longitud del cañón respecto al largo total del arma, permitiendo tener armas con la misma longitud del cañón, ahorrando peso y aumentando la maniobrabilidad en espacios estrechos.
Cuando un proyectil o armadura de acero se acelera a través de estas bobinas mediante pulsos magnéticos cuidadosamente sincronizados, los interruptores semiconductores controlan con precisión el suministro de potencia, con una precisión de nanosegundos. A continuación, algoritmos de temporización basados en Inteligencia Artificial optimizan la ventana de aceleración magnética para minimizar el desperdicio de energía y revertir la resistencia.
Otras características clave del arma incluyen fusibles de seguridad especiales para evitar la sobrecarga de la batería durante picos de corriente de 750 A, simulaciones de elementos finitos que optimizan los disparos de la bobina a milisegundos e ingeniería de disipación de calor que limita el aumento de temperatura de la batería.
Durante las pruebas, se informó que el arma disparó hasta 3.000 disparos por minuto o rpm, superando con creces las armas de fuego tradicionales. Esta cifra es significativamente mayor que la de armas de fuego convencionales como el AK-47 , que dispara a unas 600 rpm. Además, se beneficia de un disparo silencioso, sin fogonazo y con una letalidad ajustable.
Del control de multitudes a la militarización
Actualmente, el modelo de prueba alcanza una velocidad de proyectil de aproximadamente 86 m/s (282 pies/s), una velocidad rápida pero moderada en comparación con las armas de fuego convencionales. Sin embargo, resultará suficiente para funciones no letales como el control de disturbios.
"El fuego continuo a alta velocidad disuade las amenazas que se aproximan y neutraliza las reacciones enemigas, lo cual es ideal para el control de disturbios", observó el equipo de investigación dirigido por el profesor Xiang Hongjun, de la Universidad de Ingeniería del Ejército. “Otras ventajas incluyen la ausencia de fogonazo, un funcionamiento silencioso y una letalidad ajustable, lo que lo hace ideal para misiones encubiertas", añadieron.
Con la escalabilidad y la potencia mejorada de la batería, el equipo confía en que el arma podría adaptarse a funciones letales en el campo de batalla (por ejemplo, drones, torretas automatizadas o armas de infantería).
Si China madura y se militariza, podría liderar la carrera para desplegar armas pequeñas de nueva generación que utilizan propulsión electromagnética en lugar de reacciones químicas. Si bien aún no es un arma letal para el campo de batalla, insinúa un futuro en el que proyectiles electromagnéticos silenciosos y ultrarrápidos podrían reemplazar a las balas.