Miles de personas toman las calles de Israel en protesta por la destitución del ministro de Defensa

Miles de personas toman las calles de Israel en protesta por la destitución del ministro de Defensa

Netanyahu ha cesado a Yoav Gallant por defender la suspensión de la tramitación de la polémica reforma judicial.

Protestantes en Israel contra la decisión de Netanyahu de defenestrar al ministro de DefensaIlia Yefimovich/DPA

Más de 600.000 personas han salido en la noche de este domingo espontáneamente a las calles de las principales ciudades de Israel para protestar por la destitución del ministro de Defensa, Yoav Gallant, defenestrado tras defender una suspensión de la tramitación de la polémica reforma judicial.

Las manifestaciones se han reproducido desde Kiryat Shmona, en el norte, hasta Eliat, en el Sur, con especial repercusión en Tel Aviv, Jerusalén, Haifa o Beersheva, informa la televisión Channel 12.

En Jerusalén los manifestantes han comenzaso a marchar desde la vivienda del primer ministro Benjamin Netanyahu, en la calle Gaza, hacia la Knesset o Parlamento israelí y la residencia oficial del primer ministro. La Policía han empleado cañones de agua contra los manifestantes concentrados ante la vivienda de Netanyahu.

En Tel Aviv los manifestantes han cortado el cruce de Kaplan y han ocupado de nuevo la autopista Ayalon, escenario habitual de enfrentamientos entre activistas y policías.

Mientras, algunos medios citan fuentes del partido Likud de Netanyahu que aseguran que se están planteando "pausar" la tramitación de la reforma. El primer ministro Ehud Barak ha respondido a este planteamiento y ha asegurado que "pausar la reforma no parará las protestas (porque) hemos pasado el punto de no retorno".

Sin embargo ha advertido de que si los enemigos de Israel "intentan ponernos a prueba y nos provocan", comprenderán que "los israelíes se unirán para enfrentarse a ellos". "Lo que ha pasado esta noche no se olvidará. Destituir a un ministro de defensa que ha avisado de riesgos para la seguridad nacional...", ha apuntado.

Channel 12 ha informado citando fuentes propias que el Ejército israelí ha elevado el nivel de alerta ante el riesgo de que actores externos intenten aprovechar esta división. La televisión pública Kan ha respondido que esta noticia no es cierta.

Más dimisiones tras la destitución de Yoav Gallant

Además, el cónsul israelí en Nueva York, Asaf Zamir, anunció, poco después del cese del ministro, su renuncia a su cargo. "Tras los acontecimientos de hoy, ha llegado la hora de sumarme a la lucha por el futuro de Israel para asegurar que continúe siendo un faro de la democracia y la libertad en el mundo", escribió a través de su cuenta de Twitter.

La decisión del primer ministro de cesar al titular de Defensa llegó menos de 24 horas después de que este instara públicamente a interrumpir la polémica reforma.

"Lo digo en voz alta y públicamente, por el bien del Estado de Israel y de nuestros hijos, debemos frenar este proceso legislativo", dijo anoche Gallant durante una intervención televisada.

"Necesitamos detener las manifestaciones y protestas, y buscar el diálogo. Cualquier cosa que dañe la fortaleza del Ejército y el sistema de seguridad debe detenerse de inmediato", agregó, en alusión al masivo movimiento popular en rechazo a la reforma y al creciente número de reservistas del Ejército que se niegan a entrenar y a servir a modo de protesta por la misma medida.

La reforma judicial, impulsada por Netanyahu y sus socios ultraderechistas y ultraortodoxos de coalición, busca otorgar más poder al Ejecutivo en detrimento de la Justicia, cuya independencia se vería socavada.

A pesar de las críticas desde incontables sectores y de las advertencias de su impacto no solo en la separación de poderes sino también en la economía de Israel, el Gobierno continúa avanzando con algunos de los pilares de la reforma, incluyendo una ley que otorgaría control de facto al Gobierno sobre el comité de selección de jueces.

El Gobierno tiene la intención de aprobar esta última ley esta misma semana, algo que ha motivado a los organizadores de las manifestaciones a intensificar las protestas.